coyuntura
Ibercaja pospone la plena recuperación económica a 2022
La entidad rebaja su previsión de crecimiento para Aragón al 4,6% este año y estima para el próximo un incremento del PIB del 7,4%.
La recuperación económica está en marcha, pero la incertidumbre generalizada en muchos ámbitos que la afectan hace que la volatilidad esté presente en cualquier previsión que se realice. Así lo han puesto de manifiesto este martes representantes de Ibercaja al dar cuenta de sus estimaciones de cierre de 2021 y de lo que nos depara el ejercicio 2022, con cifras muy diferentes de las anunciadas el pasado mes de julio, tanto para Aragón como para España. La entidad ha corregido a la baja sus previsiones del actual año en curso y al alza las del próximo, dejando claro que la recuperación económica plena que esperaban se pospone. 2021 se cerrará, ha apuntado Santiago Martínez, jefe de Análisis Económico y Financiero del banco, con un incremento del Producto Interior Bruto (PIB) aragonés del 4,6% (la previsión anterior era del 7,45%), mientras que para 2022 se estima una tasa del 7,4%.
Los problemas derivados de la carencia de suministros, que están afectando de lleno al desempeño de la industria y de las exportaciones en Aragón, han frenado la buena marcha de la economía experimentada hasta el verano pasado -marcada por la positiva evolución de la vacunación y el fin de muchas restricciones a actividades suspendidas por la pandemia-, pero "se irán resolviendo a lo largo del próximo año, completándose la recuperación iniciada en 2021, que se verá además reforzada por la llegada de los fondos europeos Next Generation", consideran en Ibercaja. "Lo importante es la tendencia, y la tendencia es de recuperación", ha insistido Enrique Barbero, director de Comunicación y Relaciones Institucionales del banco, que considera que la mayor parte de los frenos a una actividad económica pujante son coyunturales.
Barbero ha atribuido parte del retraso de ese ritmo de recuperación deseado a las decisiones de las empresas de posponer decisiones de inversión. "La inversión empresarial es la gran rezagada en esta recuperación", ha señalado antes de advertir sobre los efectos de esa incertidumbre causada por las dudas en torno al fin de la pandemia, a los cambios del mercado energético y al retraso de los fondos europeos Next Generation. A diferencia de la crisis anterior, la que siguió al 'crack' del sector inmobiliario de 2008 y los años siguientes, el crédito bancario no ha sido en esta ocasión un problema, ya que todas las entidades están ofreciendo financiación.
Las estimaciones de coyuntura aportadas por los representantes de Ibercaja se han aportado en una presentación del nuevo número de la revista Economía Aragonesa que edita el banco, que en esta ocasión incluye tres trabajos monográficos, uno sobre el nuevo sistema de valor de la movilidad en España, escrito por Alberto Casal, socio fundador de la consultora InovaLabs Digital; otro sobre el déficit y la deuda como asignatura pendiente en la economía española, de la catedrática de Economía Aplicada María Dolores Gadea, y otro sobre la situación del mercado laboral en esa era covid, de José María García y Beatriz Callén, del departamento de Análisis y Estudios de CEOE Aragón.
