vivienda

Pisos de alquiler con opción a compra: cómo funciona y las ventajas reales

El modelo de contrato que marca plazos para que los arrendatarios puedan convertirse en propietarios experimenta un auge en los últimos meses.
Últimas noticias sobre viviendas en alquiler.

Vista panorámica desde la última planta del edificio de Torre Zaragoza.
Vista panorámica desde la última planta del edificio de Torre Zaragoza.
Toni Galán

Después de que el mercado inmobiliario haya vivido su propia montaña rusa en las últimas dos décadas, una figura no muy conocida se está abriendo paso poco a poco entre las opciones más consideradas, sobre todo entre la población joven que accede a su primera vivienda fuera del hogar familiar. La situación vivida en los últimos 18 meses y la inestabilidad laboral derivada de todo ello ha motivado la aparición de otros modelos de actuación; por otra parte, gracias a internet, existe más información y más accesibilidad a las asesorías legales.

Cómo funciona el alquiler con opción a compra

La fórmula es un contrato de alquiler que contempla una futura adquisición de la vivienda a un precio fijado en el momento de la firma, y del que se descuentan los alquileres mensuales pagados hasta el momento de la compra. Se estipula el tiempo, siendo el intervalo de dos a cinco años el más normal desde la firma del contrato a la formalización de la compra. De este modo, los nuevos inquilinos no tienen que preocuparse del 20% de entrada que exige la compra de un nuevo inmueble, dado que el monto de las hipotecas no suele pasar del 80% en los últimos años. También se ahorrarían los gastos de la operación hipotecaria, así como las tasas.

Ventajas del alquiler con opción a compra

Hay ventajas de ambos lados. El inquilino puede interrumpir el contrato en las condiciones previamente pactadas si ve que no va a poder asumir la compra. El vendedor, por su parte, recibe cantidades mensuales en concepto de alquiler durante la primera fase del contrato, y va sacando adelante la rentabilidad de su inmueble si se halla en una zona que en principio es poco atractiva para la compra, además de ganar tiempo para una recuperación económica que reactive las posibilidades de que aparezcan futuros compradores. Sí es habitual incluir en el contrato un depósito que debe aportar el inquilino, y que se pierde si finalmente no se decide a comprar.

Las condiciones, eso sí, se pactan libremente entre las partes. Lo ideal es buscar asesoramiento profesional para no dejar ningún fleco y que esta transacción se corone con el éxito.

Últimas noticias sobre vivienda en alquiler.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión