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Precios medios del alquiler y venta de apartamentos en la costa este verano

La pandemia no ha provocado una caída importante como en la crisis de 2008 ya que la demanda nacional ha ido ganando peso para cubrir la falta de extranjeros.

Apartamentos en Tarragona.
Apartamentos en Tarragona.
Solvia

Los precios de los apartamentos en la costa no han reflejado hasta ahora grandes cambios, ni en la compra ni en el alquiler, debido a la crisis sanitaria y económica provocada por la covid-19. Las estadísticas muestran ligeras subidas o bajadas, pero cercanas a la estabilidad. La evolución de la situación sanitaria sigue siendo la clave para saber por dónde puede ir el mercado inmobiliario.

"En el mercado de costa, sobre todo, la que interesa a los aragoneses, la Dorada (Salou y Cambrils) y la de Azahar (Oropesa, Castellón), aunque ha habido ciertas variaciones, el comportamiento de los precios ha sido muy estable", asegura Ferrán Font, director de Estudios del portal inmobiliario pisos.com. Habría habido una "ligera variación" en la renta de alquiler, un 0,7% de bajada y una renta media de 715 euros a la semana, y del 2,66% en la compra, con un precio medio de 218.000 euros. En ambos casos se trata de precios de salida de los propietarios, que en el caso de las ventas suelen negociarse con rebajas de entre el 10% o 15%, dependiendo de los casos. "En general, la evolución de los precios que tenemos en los portales de pisos suele ser la avanzadilla de lo que pasa después en los mercados", afirma.

En el cuadro elaborado por el portal para este verano se recoge en la costa del Azahar un precio del alquiler de apartamentos por semana inferior a la Dorada, con 586 euros, lo que supone una subida del 1,38%, que también considera un síntoma de estabilidad. Los precios de venta que piden los propietarios en la zona se sitúan en los 169.000 euros de media.

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Costa del Garraf (483.035 euros) repite en primera posición en el ranquin de los pisos medios más caros en venta, según Pisos.com. Le siguen la Costa Vasca (432.618 euros) y la Costa Brava (371.691 euros) se mantienen en segundo y tercer lugar. Los precios más bajos han salido a la venta en la Costa de Almería (116.072 euros), Costa Cálida (146.523) y Rías Altas (150.709), "al igual que el año pasado", precisan.

Las compras de españoles aguantan el sector

"Las previsiones en verano del pasado año apuntaban a un impacto relevante ante la ausencia de demanda por parte de compradores extranjeros, provocado por las restricciones a la movilidad y la actividad turística", reconoce José Luis Bellosta, presidente ejecutivo de Solvia, inmobiliaria que cuenta con pisos procedentes de la banca. Sin emargo, "los precios se han mantenido fuertes, sin haber sufrido grandes descensos", afirma, gracias "a la respuesta de la demanda nacional, que fue más positiva de lo esperado". Hubo más interés por parte de clientes españoles aunque también hubo un aumento de propietarios que colgaban el cartel de 'se vende' ante la incertidumbre o por necesidad. "Habrá que ver cómo se desarrollan los próximos meses y si la demanda responde", señala el directivo.

Font apunta que se trata de una crisis "totalmente distinta" a la de 2008, que fue "sistémica", afectando a la "estructura del sector", que venía reforzada por la "sobrefinanciación". Entonces se produjo un desplome de los precios, que en muchas localidades siguen por debajo del 50% de los máximos de 2007, antes del 'pinchazo', según la tasadora Tinsa.

"En zonas 'prime' de playa, como la Costa de Sol, se está percibiendo la vuelta del comprador extranjero, su principal público objetivo", explica Bellosta. En esta última zona andaluza estarían viendo el "despertar" del comprador español "de alto poder adquisitivo" lo que "está contribuyendo a la recuperación del mercado".

En este sentido, la tasadora Tinsa ha recogido en su último informe que las provincias costeras de Málaga, Almería y Alicante registraron en el último año "el mayor número de compraventas proporcionalmente a su mercado". Así, en el caso de la primera, entre el segundo trimestre de 2020 y el primero de 2021 (último dato disponible), se vendieron 28,2 viviendas por cada 1.000 existentes, según datos del Ministerio de Transportes (Mitma), por encima de las 19,9 de la media española.

"La pandemia ha dejado huella en el sector de costa, tal y como afirma el Banco de España en su último Boletín Económico, especialmente en las zonas de la costa mediterránea y en las islas", recuerda. Según el informe 'Indicadores del mercado de la vivienda' del organismo, el precio de los inmuebles de las provincias de la costa este, sur e islas se redujo un 0,2% en un año.

Un descenso casi equivalente a la estabilidad, Bellosta considera que "es un momento idóneo para comprar" porque hay "interesantes oportunidades". Desde la firma han lanzado varios paquetes de viviendas con descuento en provincias como Tarragona que incluyen vivienda nueva con un precio de 70.000 euros  y una superficie de 77 metros cuadrados de media. Cuentan con vivienda de distintos tipos en Cambrils, Salou o Sant Carles de la Rápita.

Teletrabajar desde la playa

Al igual que en la primera vivienda, la pandemia también ha cambiado los gustos y los compradores buscan "pisos más espaciosos y con espacios exteriores" y hay más demanda para obra nueva, añade. En algunos casos, el teletrabajo ha motivado las compras, por lo que se busca un "segundo hogar" y no solo un estudio para fines de semana o vacaciones. "Ahora es un comprador mucho más enfocado a disfrutar de su segunda vivienda, dejando a un lado el interés inversor de destinarla al alquiler vacacional", asegura el directivo de Solvia.  

"Ahora es un comprador mucho más enfocado a disfrutar de su segunda vivienda, dejando a un lado el interés inversor de destinarla al alquiler vacacional"

La caída del comprador y el turista extranjero no ha provocado una mayor rebaja de precios porque ha aumentado la de los españoles. "El mercado se va a adaptando a la menor movilidad internacional, pero el cliente nacional seguirá apostando por los destinos nacionales y seguirá ganando peso", augura Font. "Tendremos que ver cómo reacciona a esta nueva ola del virus pero es imprescindible que aquellos países que han sido exportadores de turistas para España se den cuenta de que es un destino seguro", plantea. Estos días han seguido los llamamientos de países como Francia y Alemania para que sus nacionales no se desplacen a España por el riesgo de contagio.

Solvia ya incluye en sus previsiones un incremento en la demanda este verano que puede traducirse en un aumento de precios de "aproximadamente el 2%, especialmente en aquellas zonas del norte y ubicaciones 'prime' donde ya estamos percibiendo un interés de compraventa".

A la hora de hacer previsiones, Font señala que "todo lo que sea inestabilidad no es bueno para el mercado inmobiliario", sobre todo, en el caso de la compra de una segunda vivienda. "Son tomas de decisión importantes y si hay más restricciones se puede posponer decisión", explica. Los factores que condicionarán la evolución del mercado seguirán siendo, como el año pasado, "la evolución de la pandemia y si aparecen nuevas olas", además de la vacunación. "Tendremos que ir adaptándonos. La pandemia aún sigue aquí, con lo que todos los sectores pueden verse condicionados", advierte. Del lado positivo señala que las previsiones de crecimiento para España van superando el 6%, "mejor de lo esperado", recalca, y tienen que llegar los fondos europeos.

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