sd huesca
Los empates ralentizan la progresión de la SD Huesca
Las tablas de las cuatro últimas jornadas mantienen al equipo de Cuco Ziganda en una zona tranquila pero más lejos de la zona noble.
Empate a empate, y ya son cuatro consecutivos con el sumado el domingo ante el Real Oviedo (1-1), la SD Huesca se asienta en la zona templada de la clasificación, la destinada a aquellos conjuntos que ni van a soñar con algo grande ni a padecer en lo que resta de campeonato, y se aleja de las posiciones de ‘play off’. El comienzo del año, que recoge la inercia del final del pasado, está lastrando la posibilidad de que el conjunto de Cuco Ziganda se asome a la sexta plaza. Y eso que ante los asturianos se superaron varios registros: fue el partido de la temporada con más posesión de la pelota y con más remates tras 24 jornadas disputadas.
Los oscenses terminaron 2022 con una victoria ante el Andorra (1-0), la última por ahora del curso, una derrota con el Real Zaragoza (3-0) y un empate en Burgos (1-1), la primera de una secuencia de tablas que ha continuado en enero ante Albacete (1-1), Cartagena (0-0) y Real Oviedo. La SD Huesca acumula diez empates en 24 partidos y solo el Levante, con once, ha sumado más. Un dato que no debería sorprender a la luz de la trayectoria del entrenador navarro cuando dirigía a los ovetenses. En la campaña 20-21, el suyo fue el equipo que sumó más igualadas en Segunda División (19) y al año siguiente alcanzó las 17, solo por detrás del Real Zaragoza y el Lugo con 20.
La SD Huesca se encuentra, con 31 puntos, a siete de los puestos de ‘play off’ y seis sobre el descenso. En este último periodo se ha alejado de los primeros y acercado a los segundos a la misma velocidad que han marcado los empates. Tras ganar al Andorra se hallaba a cuatro puntos del sexto clasificado y ha llegado a estar nueve por encima del peligro. Un equilibrio que se mantuvo la pasada jornada en una cita en la que el equipo de Ziganda se mostró más incómodo y precipitado cuando jugó con un futbolista más por la expulsión de Luismi y no cambió su idea futbolística en superioridad numérica. Sin embargo, la estadística refleja que mejoró en el aspecto ofensivo.
El Real Oviedo de Álvaro Cervera planteó a los azulgranas el desafío de qué hacer con la pelota. Durante lo que va de temporada, el promedio de posesión ha estado en torno al 40% y el domingo este dato fue del 63%. Además, los oscenses realizaron 14 disparos a portería, cinco de ellos entre palos incluido el golazo de tijera de Jorge Pulido. Más que en ningún otro compromiso anterior. La media de estas 24 jornadas es de 6,6 remates por encuentro, de los que 2,4 son entre palos. Los asturianos remataron en ocho ocasiones cuando el rival lo hace, por término medio, doce veces. El crecimiento en este sentido no llevó consigo la victoria. Y cabe recordar que se derrotó al próximo rival, la UD Las Palmas (1-0) con un 14,6% de posesión.
Para encontrar otra secuencia de cuatro empates en Segunda División hay que remontarse a la temporada 2009-10, aunque se trata de un registro que también se alcanzó en los dos cursos en Primera División. En la temporada 2020-21, y con Míchel Sánchez en el banquillo, se igualó en cinco de las seis primeras jornadas y, de manera consecutiva, con Valencia, Atlético de Madrid, Elche y Real Valladolid. Dos años antes, y en el tramo final de una campaña en la que los azulgranas se aferraban a la vida con escasas fuerzas, se empató entre las jornadas 30 y 33 con Celta, Levante, FC Barcelona y Rayo Vallecano. Un resultado que sería saludado como positivo este sábado en el estadio de la UD Las Palmas (21.00, LaLiga SmartBank TV).
La plantilla ha realizado este lunes la tradicional sesión de recuperación después de los partidos, con los futbolistas divididos en dos grupos: por un lado, los titulares ante el Real Oviedo, que se han limitado a realizar carrera continua y a trabajar en el gimnasio, donde han permanecido Jorge Pulido, Joaquín, Valentín y Cristian Salvador. Por el otro, el resto con la única ausencia del lesionado Marc Mateu. La expedición viajará el viernes a Las Palmas de Gran Canaria y regresará a Huesca el domingo.
