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500 aficionados arropan a la SD Huesca en el entrenamiento de puertas abiertas

Los azulgranas han trabajado este jueves en El Alcoraz con las ausencias de Kevin Carlos y Euse Monzó, que se marcha cedido al Sanse de Primera RFEF.

Arropados por más de 500 aficionados, los futbolistas de la SD Huesca se han entrenado este jueves en El Alcoraz al abrigo de los niños y mayores que han aprovechado la jornada de puertas abiertas para ver más de cerca a sus ídolos. Poco han importado la niebla y el frío de la mañana de Reyes, y todos ellos han disfrutado de una sesión de trabajo en el mismo escenario que el lunes albergará el comienzo de la segunda vuelta con el Albacete Balompié como rival (21.00, LaLiga SmartBank TV). El ensayo general de mitad de semana se ha convertido así en una fiesta con público.

Las gradas de Preferencia y Tribuna se han poblado con aficionados de todas las edades que se han acercado al estadio con la promesa cumplida de un autógrafo de los jugadores, que también han regalado imágenes, bufandas y hasta equipaciones oficiales, en el caso del meta Miguel San Román. Además, han podido ver a casi todos los jugadores. Solo se han ausentado Kevin Carlos, a la espera de que se oficialice su cesión al Real Betis, y el también canterano Euse Monzó, que jugará lo que queda de temporada a préstamo en el San Sebastián de los Reyes de Primera RFEF.

La mascota de la SD Huesca, Dragonés, también ha amenizado los minutos previos al entrenamiento, mientras los jugadores y técnicos asistían a una nueva sesión de vídeo de las que dan contexto al trabajo que se desarrolla después sobre el terreno de juego. Entre los futbolistas con más poder de convocatoria, los clásicos: Jorge Pulido, Andrés Fernández o Marc Mateu. También otros como Joaquín Muñoz o los más jóvenes, que han encontrado rostros conocidos en la grada. También se ha sumado al trabajo Juan Villar, ausente el miércoles con problemas físicos. El resto está disponible para el lunes a excepción del sancionado Cristian Salvador.

Cuco Ziganda ha planificado una sesión vistosa, con permiso de la niebla, en la que se han trabajado acciones de ataque y defensa con vítores en la grada cuando se marcaban goles y lamentos cuando se marraban ocasiones ante la portería. El técnico azulgrana deberá buscar un sustituto para Salvador en el centro del campo y decidir si mantiene el esquema de tres centrales o si, con la vuelta de un Marc Mateu completamente restablecido, regresa al tradicional 4-4-2.

Tras el entrenamiento, Ignasi Vilarrasa se ha referido a que “todos hemos sido niños y nos gusta dar esta alegría a los chavales con firmas y fotos, que es enriquecedor para todos”. Después de varias semanas sin competir, “hay ganas de que llegue el lunes y de sacar los tres puntos, mostrarnos fuertes en El Alcoraz como hemos hecho durante la primera vuelta”. El catalán confía en seguir como titular después de haberse asentado en el once después de la lesión de Mateu y con independencia de la vuelta de este último a los planes de Cuco Ziganda.

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