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Los cuatro predecesores de Martín González en la dirección deportiva de la SD Huesca
Luis Helguera estrenó el cargo en 2014 y hasta la llegada del ex del Getafe por él también pasaron Lalo Arantegui, Emilio Vega y el más reciente, Rubén García.
Dentro de la historia moderna de la SD Huesca, aquella que abarca desde su estreno en el fútbol profesional en 2008, la figura del director deportivo que ahora pasa a encarnar Ángel Martín González es relativamente reciente, aunque el madrileño cuenta ya con cuatro predecesores. El primero fue Luis Helguera y el que más tiempo ha durado en el puesto ha sido el que hasta ahora era el último Rubén García, que ejerció durante tres años. Entre uno y otro se sitúan Lalo Arantegui y Emilio Vega.
Helguera fue nombrado director deportivo de cara al curso 2014-15, el que iba a ser el segundo consecutivo de los oscenses en Segunda B tras el descenso de 2013 y después de que una vez colgadas las botas ya hubiese ejercido durante un año diversas labores técnicas. El equipo acabaría regresando a la categoría de plata y el marchó a la UD Las Palmas.
Para sustituirle se eligió a otro exjugador azulgrana, Lalo Arantegui, que se incorporó desde el Villareal en junio de 2015 para marchar en febrero de 2017 al Real Zaragoza junto al secretario técnico, Barba. En la primera de sus campañas el Huesca se salvó no sin realizar un relevo en el banquillo, el de Tevenet, técnico heredado de la etapa anterior, por Anquela, y en la segunda, que no concluyó, se alcanzó el ‘play off’.
Le sucedió Emilio Vega, que tenía como anterior destino el Córdoba. El leonés fue responsable en buena medida del diseño de la plantilla del primer ascenso a Primera División, pero igualmente participó en la posterior del desembarco en la élite en la que las diferentes apuestas no salieron bien y acabó perdiendo protagonismo.
La llegada de Rubén García se oficializó el 30 de abril de 2019, aunque ya había colaborado en alguna operación previa como la de Yangel Herrera. En su primer mercado de verano, tras el descenso lidió con la Oikos y ya con el curso en marcha con el estallido de la pandemia. De la mano de Míchel el Huesca volvió a Primera, categoría en la que se mantuvo con opciones de permanencia hasta la última jornada. Se le renovó, pero en el curso que ahora ha acabado no logró armar un grupo capaz de luchar por los primeros puestos y hace dos semanas fue destituido.
