La SD Huesca se abre al mercado global

La instalación de la SD Huesca en la elite del fútbol español ha llevado aparejada su apertura a un mercado global de futbolistas de todos los continentes. Un proceso que no se circunscribe solo a las últimas temporadas y que se inició hace 15 años, desde que el proyecto pasó a manos de la Fundación Alcoraz. Hasta entonces, y producto de su naturaleza humilde, los ejemplos llegados de otros países se podían contar con los dedos de una mano. El balance del club azulgrana, desde 2006 a la temporada en curso, es de 48 jugadores procedentes de 24 países diferentes. El último en debutar ha sido el defensa eslovaco Denis Vavro.

El equipo aragonés se ha fijado en objetivos de todo el planeta para completar plantillas eminentemente nacionales. Valga el ejemplo de la de la temporada pasada, que logró el campeonato de plata y el regreso a Primera con solo seis futbolistas nacidos fuera de España. Algo similar se puede decir ahora, pues en la máxima categoría solo un comunitario, el griego Dimitrios Siovas, rompe esta tendencia. Otro jugador que ha visto cómo crecía su importancia es el centrocampista costamarfileño Idrissa Doumbia. Ahora se ha sumado Vavro como antes lo hizo el uruguayo Gastón Silva, lesionado, para completar un once tipo repleto de nombres domésticos. Menos minutos tienen ahora el japonés Shinji Okazaki y el portugués Luisinho Correia, mientras que el nigeriano Kelechi Nwakali salió cedido al Alcorcón en el mercado invernal.

El Huesca ha pescado en cuatro continentes y América es el que más ha frecuentado. La campaña anterior podría ser casi una excepción, pero realizó la pretemporada a las órdenes de Míchel Sánchez el atacante colombiano Juan Peñaloza, que después no gozó de minutos en encuentros oficiales y ahora está cedido en el Racing de Ferrol 25 jugadores de Sudamérica han vestido la camiseta azul y grana; el caladero más frecuentado ha sido Argentina con nueve incorporaciones para todos los puestos. La más memorable, la de Chimy Ávila frente a lo discreto de otras como Mustafá, Gerardo Bruna o Ezequiel Rescaldani. Completan la lista Damián Musto, Axel Werner, Martín Mantovani, Marcos Mauro y Leo Franco, este como guardameta primero y entrenador más adelante.

Venezuela ha sido otro de los países de los que se han incorporado piezas que, en algunos casos, han gozado de una proyección mayor en sus posteriores destinos en España. Yangel Herrera y Darwin Machís, ambos ahora destacando en el Euro Granada, representan el paradigma de esta afirmación. Alexander González, Dani Hernández y Juanpi Añor también jugaron en el cuadro oscense y comparten con los otros dos nombres la condición de internacionales absolutos con la Vinotinto.

La presencia de jugadores brasileños arroja más sombras que luces: los delanteros Reinaldo y Rodrigo y el centrocampista Felipe Manoel no dieron muestra de lo que prometían. Algo más positivo fue el paso de Vinícius, después futbolista del Real Zaragoza, y sobre todo el de Gilvan Gomes, un extremo desconocido en España, que llegó procedente del fútbol coreano y que, tras asombrar a propios y extraños, pasaría por el Hércules y el Eibar.

El colombiano Cucho Hernández ha representado otro de los movimientos más relevantes de los últimos años. Protagonista del ascenso de 2018, su paso todavía naciente por el fútbol nacional le encuentra asentado en Primera después de haber actuado en el Mallorca y ahora en el Getafe. Otros dos internacionales por Uruguay han dado firmeza defensiva al Huesca en diferentes épocas: Carlos Diogo en la temporada 12-13 y Gastón Silva en la actualidad. Y dos delanteros dejaron una impronta discreta, el costarricense Jonathan Moya y el chileno Nico Medina.

Mientras, 15 jugadores europeos de nueve países diferentes han dado poso cosmopolita al proyecto. Portugal es el país que encabeza este ránking con cuatro aportaciones, todas ellas de defensas. Sigue en el plantel Luisinho como antes lo estuvieron Josué Sá, Rubén Semedo y Jair Amador, este último con doble nacionalidad luso-caboverdiana y ahora en las filas del Real Zaragoza.

En esta simbólica clasificación seguiría Serbia con tres jugadores: el portero Aleksandar Jovanovic y los zagueros Ranko Brezancic y Marco Lukic. Completan la nómina europea Vavro (Eslovaquia), Datkovic (Croacia), Longo y Scardina (Italia), Gürler (Turquía), Cmiljanic (Montenegro) y Coulibaly (Francia) además del heleno Siovas.

África, el sempiterno continente al alza en el fútbol mundial, ha sido frecuentado por la SD Huesca. Costa de Marfil vio nacer a los dos últimos ejemplos, los de los pivotes defensivos Idrissa Doumbia y Cheick Doukouré; Nigeria ha estado representada por Nwakali, Camerún por Franck Bambock, Guinea Ecuatorial por Carlos Akapo, Gambia por Gassama y la República Democrática del Congo por el delantero Neny Bihombele, miembro de la plantilla que logró el ascenso de Écija en 2008. Asia, un mercado siempre apetecible, solo ha encontrado de momento el reflejo del japonés Shinji Okazaki.