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El Alcoraz ya está listo para albergar el SD Huesca-Betis
Tras un intenso trabajo en el que han tenido que arrimar el hombro incluso trabajadores de las oficinas, el campo ha quedado limpio de nieve.
Han sido horas de intenso trabajo, pero del manto blanco que el sábado cubría El Alcoraz se ha pasado en la mañana de este lunes, en las horas previas al encuentro que debe medir a las 21.00 a la SD Huesca y al Betis, a un tapiz verde apto para el juego. El ‘milagro’ se ha obrado gracias a los trabajadores y los colaboradores de la empresa Huesca Garden, encargada de la jardinería del club, que desde el domingo a primera hora se afanó en limpiar pala en mano los casi veinte centímetros de nieve que habían caído sobre la instalación, y que fueron ayudados por empleados y altos cargos del club. En total, han sido alrededor de cincuenta personas las implicadas.
A primera hora de la tarde del domingo ya se había habilitado una parte del campo que hizo posible que Míchel y sus hombres se pudiesen entrenar. Ya por la noche los trabajos estaban muy avanzados y esta mañana se ha terminado de limpiar. Ahora, la preocupación en lo que al césped se refiere, se centra en las condiciones en las que estará, más que probablemente helado y especialmente en Gol Sur. No en vano, se esperan temperaturas de hasta -7º bajo cero. En este sentido, fruto de las buenas relaciones, se han conseguido vía Osasuna dos mantas térmicas de mil metros cuyo fin es elevar la temperatura de las áreas.
La puesta a punto del campo, sobre la que existían dudas hasta el punto de que el técnico del Betis, Manuel Pellegrini llegó a pedir públicamente el aplazamiento basándose en las adversidades que se podía encontrar su equipo durante el trayecto y en las condiciones de El Alcoraz, ha hecho que incluso desde La Liga se haya trasladado la felicitación al club, que venía preparándose desde el principio de la semana pasada cuando las previsiones meteorológicas comenzaron a avisar de lo que podía ocurrir.
A este respecto, Jorge Larrosa, exguardameta azulgrana y responsable de Huesca Garden, elaboró un plan y dispuso los medios materiales humanos que iban a hacer falta. Se hizo acopio de veinte palas y se emplearon tres vehículos que el viernes quedaron cargados de combustible.
