La SD Huesca, a por la tercera victoria seguida bajo la sombra del coronavirus

La covid-19 vuelve a condicionar a la SD Huesca. Esta vez, por un positivo revelado en la víspera del partido de este viernes ante el Athletic en San Mamés (21.00, Gol). No afecta a ningún futbolista, pero la plantilla y cuerpo técnico debieron someterse ayer a una nueva tanda de test PCR, con un saldo negativo, entrenar de manera individual y retrasar su viaje vespertino a Bilbao. La persona afectada, en buen estado de salud, ya se encuentra aislada en su domicilio para iniciar la cuarentena mientras el equipo persigue la tercera victoria consecutiva tras las logradas ante Alavés en Liga y Marchamalo en la Copa del Rey.

La escuadra oscense se ha tomado esta semana dos dosis de la medicina universal que todo lo cura: las victorias han cambiado el paso de un equipo que parecía sumido en una dinámica derrotista inacabable. Cuesta menos levantarse de la cama cuando se encadenan buenas noticias y los azulgranas quieren proseguir con la escalada hasta abandonar los puestos de descenso. Los tres puntos de la pasada jornada les permitieron dejar atrás el farolillo rojo y ya se mira con ganas hacia la siguiente estación: San Mamés. Con bajas. Sin Sandro Ramírez, que no se ha recuperado a tiempo de su lesión muscular, ni Luisinho, con una rodilla inflamada tras el choque del martes.

El partido contra los vitorianos se sacó adelante con el mismo trazo de toda la temporada y la mejoría que ya se registró en Granada a pesar de aquel traumático final de partido. Míchel ya había advertido de que no daría volantazos estilísticos. En ese sentido, el encuentro mantuvo las señas de varios de los anteriores. Lo que marcó la diferencia, también en Granada, fue el paso adelante de algunos futbolistas. Ontiveros, con el recuerdo emocionado a su abuela enferma de covid-19 que dio la vuelta al mundo, y Rafa Mir con su ‘hat trick’ copero han sido los nombres propios de las últimas fechas.

El técnico, reforzado tras haberse sumado cuatro de los últimos seis puntos en juego, ha encontrado también una base que protegió en la cita entre semana. No es complicado intuir por dónde tirar: por el equipo de las dos últimas jornadas y el aderezo de Ontiveros o Mir. La ausencia de Sandro abre las puertas de la alineación al extremo o al punta. El andaluz parte con ventaja si se quiere ampliar el campo y, sobre todo, aprovechar a un futbolista en estado de gracia. Ya brindó buenos minutos en Los Cármenes y frente al Alavés dio un recital coronado por su golazo.

Rafa Mir, que perdió su sitio en el equipo la pasada jornada, se reivindicó como mejor sabe en una cita menor pero repleta de trampas. Sigue siendo el máximo anotador en la Liga, con otros tres goles, y la SD Huesca no puede quejarse del rendimiento de sus puntas. Okazaki se estrenó en Granada y sigue siendo el jugador trabajador y generoso que ya fue en Segunda. Así, la baja de Sandro Ramírez duele menos. Los azulgranas se presentarán en la Catedral con los futbolistas que no acudieron a Marchamalo para medirse a un Athletic de Bilbao que ese mismo día cayó derrotado ante el Real Madrid por un engañoso 3-1.

Los bilbaínos se llevaron de propina dos bajas, las de los sancionados Raúl García y Yeray Álvarez. El entrenador, Gaizka Garitano, no deja de estar discutido. Sin embargo, en Valdebebas acariciaron el empate y en su estadio han superado a conjuntos como Betis, Sevilla y Levante. Tres puntos separan a leones y azulgranas, los primeros con un partido menos. Es un partidazo.