Sucedió en el final de la primera vuelta contra el Leganés y volvió a repetirse el sábado en el inicio de la segunda frente al Atlético de Madrid. Después del paso por los vestuarios, la SD Huesca sufrió un desplome en su rendimiento. Cuestionado sobre esta circunstancia tras el duelo con los rojiblancos, el técnico Francisco Rodríguez lo achacó a un aspecto mental, más que de estado de forma. "Durante las jornadas que llevo aquí, en las segundas partes habíamos sido un equipo que se había mostrado en campo contrario. Es cierto que en los últimos veinte minutos en Leganés no dimos la talla y con el Atlético tras el descanso no hemos estado acertados. Al final lo psicológico también afecta a un conjunto que es colista y al que los goles en contra le han hecho daño", expuso el preparador almeriense.

La declaración resulta llamativa en cuanto que hasta el momento uno de los aspectos fuertes que había mostrado el sustituto de Leo Franco había sido el de imprimir en los jugadores templanza y hambre en su ánimo. Sin embargo, los reveses parecen haber acabado calando en el vestuario.

No en vano, a lo largo del curso el Huesca suma 751 minutos por detrás en el marcador de los 1.800 que lleva disputados en Liga, es decir el 41% de su estancia sobre el césped. El dato contrasta con el tiempo en el que ha disfrutado de un resultado positivo, solo 219 minutos, el 12,1%. De hecho, en trece de las veinte jornadas no ha logrado ponerse por delante en ningún momento y únicamente en tres no ha ido perdiendo en alguna fase del partido. Ocurrió en la victoria contra el Eibar por 1-2 y en los empates con el Getafe (1-1) y el Levante (2-2). El duelo en el que tuvo que aguantar más tiempo con un resultado adverso fue en la visita al Metropolitano, 74 minutos.

La caída en el rendimiento de los altoaragoneses en las segundas partes se ha producido, paradójicamente justo después de haber logrado su primera remontada del curso, la que le dio la victoria ante el Betis. En aquel partido, Sanabria adelantó a los andaluces, pero Ferreiro y Rivera le dieron la vuelta al marcador.

Una semana después en Butarque, y tras haber firmado una correcta primera parte, una salida briosa del Leganés acabó aturdiendo al Huesca. En-Nesyri batió a Santamaría y en los 17 minutos restantes los visitantes no lograron levantarse.

Algo similar ocurrió el sábado. Los de Francisco merecieron cerrar el primer acto con algún gol en su casillero, pero el marcador reflejó entonces un 0-1. Después el Atlético de Madrid tuvo una primera ocasión nada más reanudar el duelo y en el 51 Arias cantó el 0-2. Las aproximaciones de los locales desde entonces al área de Oblak dejaron de tener mordiente y los rojiblancos incluso marcaron una tercera diana.

Los cambios

Buena parte de la reacción vivida por el Huesca en la visita del Betis llegó gracias a los cambios. Desde el banquillo ingresaron Chimy Ávila, Gallar y Sastre. Los dos primeros han sido reservados para jugar el mismo papel en los dos siguiente compromisos, pero el resultado no ha sido ni mucho menos el mismo. Francisco señaló en Butarque que las sustituciones no habían aportado como siete días atrás y el sábado en El Alcoraz cuando les tocó entrar en el campo el encuentro se había inclinado hacia arriba.