El Real Zaragoza y los cuatro porteros
No tiene que ser fácil ir estos días a entrenar a la Ciudad Deportiva si eres portero. A tu lado, todos los entrenamientos, tienes a tres compañeros que quieren exactamente lo mismo que tú: jugar de titular bajo los palos de la portería del Real Zaragoza. Solo uno puede hacerlo, así que el resto se resigna a ver los partidos en el banquillo o en la grada.
La competencia por un puesto en el once inicial es normal y muy sana para cualquier plantilla. Ocurre en todos los equipos y en cualquier posición. Pero que haya cuatro porteros profesionales en un vestuario es algo prácticamente inédito. Mucho habría que rebuscar para encontrar un caso similar. Habitualmente hay dos, con un canterano como tercer guardameta en busca de una oportunidad.
Esta situación, inexplicable a todas luces, habla de una mala planificación por parte del director deportivo, Juan Carlos Cordero. La lesión de Cristian Álvarez, el desastre de Gaetan Poussin y el mediano rendimiento de Dani Rebollo obligaron a fichar a un portero en el mercado de invierno. Y se fichó bien, con un Edgar Badía que salvó puntos en todos sus primeros partidos, aunque en las últimas jornadas haya bajado su ratio de paradas milagrosas por encuentro. El error entonces, en ese mercado de enero, fue no dar salida a ningún portero. El Real Zaragoza necesitaba fichar gol arriba y aligerar la nómina de guardametas, y no logró ninguna de las dos cosas.
Ahora, Víctor Fernández deberá elegir entre el generoso catálogo de porteros que tiene para guardar la portería. Con el buen rendimiento que ha dado desde su llegada Edgar Badía y con Cristian Álvarez cogiendo ritmo, parece difícil que haya un relevo en la portería, al menos a corto plazo. Esta circunstancia habla mucho y bien del recién llegado, porque hasta hace nada parecía impensable que alguien cuestionara la titularidad del argentino, que es capitán para la plantilla e icono para la afición. No obstante, estos roles pueden cambiar en cualquier momento, en función del rendimiento de cada uno o incluso de los resultados del equipo. Y ojo: salvo Badía, los otros tres porteros tienen contrato el año que viene. Habrá que ver cuántos se quedan.
