El fichaje de Arnau Puigmal por el Real Zaragoza, desmoronado por una lesión

Una lesión muscular ha desmoronado el fichaje de Arnau Puigmal por el Real Zaragoza. El mediocentro-interior derecho del Almería, que la semana pasada estaba a punto de firmar su salida del club andaluz camino del zaragocista como refuerzo del mercado invernal, sufrió una rotura fibrilar en la parte posterior del muslo derecho en un entrenamiento y deberá estar de baja más de un mes.

Esta circunstancia, de fuerza mayor, ha cambiado por completo los planes del área deportiva de la SAD zaragocista. No se pude fichar en enero a un jugador lesionado cuando, en esta singular y delicada ventana de contrataciones a mitad de liga, lo que se requiere es rendimiento inmediato y seguro por parte de los jugadores que se traen a tratar de mejorar las prestaciones del actual vestuario. 

En el mejor de los casos, Arnau Puigmal no podrá empezar a entrenarse de nuevo hasta mitad de febrero, por lo que su concurso de nuevo al cien por cien sobre el terreno de juego se demorará hasta finales del próximo mes. Eso, en el mejor de los casos, pues su dolencia no es leve y depende directamente de cómo evolucione la encarnadura del músculo lastimado, en la zona de los isquiotibiales. 

En Almería, a día de hoy, dan por disuelta su salida de la plantilla rojiblanca. Asumen que Arnau se quedará hasta junio y no saldrá traspasado o cedido, como era el plan del club sureño hasta tan desgraciada lesión. Y, por ende, en la dirección deportiva del Real Zaragoza han dado carpetazo a esta operación que empezó a fraguarse el  6 de diciembre en Barbastro, cuando el Almería fue el rival del club oscense en la segunda ronda de la Copa del Rey en el Municipal barbastrense y Juan Carlos Cordero, responsable de área del club zaragozano, acudió allí para tantear su posible fichaje, así como el del portero Mariño (que finalmente se quedó en nada al surgir la opción de Edgar Badía, guardameta que finalmente sí ha sido fichado por el Real Zaragoza).

La llegada de Arnau Puigmal, futbolista polivalente que también se puede adaptar al lateral derecho de una defensa con cinco piezas, con tres centrales, entraba dentro del plan de salida de Bermejo, al que el club zaragocista está dispuesto a dejar salir antes del día 31. Ahora, si esto sucede finalmente, el relevo tendrá que ser otro. El inconveniente con Arnau ha sido tan inesperado como de imposible solución en tan corto plazo de tiempo como otorga a los clubes la reducida ventanilla de los fichajes invernales.