El Real Zaragoza piensa en Pablo Machín y Julio Velázquez como relevo de Fran Escribá
El club medita la destitución del técnico tras la derrota contra el Huesca y tiene a Machín como favorito para sustituirle, con Julio Velázquez en la recámara.
El Real Zaragoza prepara el despido de Fran Escribá tras la derrota contra el Huesca y después de que La Romareda reclamara la marcha del entrenador. El consejero Mariano Aguilar, Raúl Sanllehí y Juan Carlos Cordero han abandonado a toda velocidad La Romareda para reunirse y tratar la salida del entrenador, aunque la decisión no se dará a conocer hasta el domingo, si finalmente supone el cese de Escribá. La espiral de malos resultados es el desencadenante, en un equipo que no emite señales de reacción. A su vez, la entidad acelera la contratación de su relevo. El Zaragoza, sobre todo tras la debacle contra el Atzeneta, ya valoró la salida del técnico y activó contactos con técnicos sin equipo, tal y como informó este diario. El soriano Pablo Machín es el mejor colocado, el favorito en los diferentes estamentos del Real Zaragoza para hacerse cargo del equipo hasta final de temporada, en un acuerdo que incluiría alguna campaña adicional de contrato. La otra alternativa estudiada es el salmantino Julio Velázquez, a quien Juan Carlos Cordero estuvo a punto de entregarle el banquillo del Tenerife en agosto de 2020, cuando se decantó finalmente por Fran Fernández.
¿Quién es Pablo Machín?
En el momento en el que se dé luz verde al finiquito de Escribá, el Real Zaragoza culminará las conversaciones ya en marcha con Pablo Machín. Su nombre, como ya avanzó este diario el miércoles, estaba en el abanico de aspirantes con los parámetros que mejor encabajan en el Real Zaragoza. El soriano de 48 años, después de los tanteos iniciales, ha mostrado su buena disposición para hacerse cargo del equipo y retornar a la Segunda División. Es uno de los técnicos a mano con mejor cartel. De trayectoria reciente en Primera con Elche, Espanyol, Alavés y Sevilla, se hizo un nombre en el Girona, conjunto al que ascendió y sujetó en la máxima categoría antes de dar el salto al Ramón Sánchez Pizjuán. Desde entonces, ha permanecido en la rueda de entrenadores de Primera, sin lograr afianzarse en ningún club y con experiencias puntuales en el fútbol árabe (Al Ain y Al Raed).
Su estilo está definido por sus sólidas estructuras ofensivas, la intensidad y ritmo alto de sus equipos, y por un sistema, casi siempre, en función de las características de sus plantillas, levantado sobre tres centrales y carrileros: 3-5-2, el 3-3-3-1 o 3-4-3 suelen ser sus esquemas, aunque también ha recurrido a las defensas clásicas de 4 en las últimas experiencias como técnico de emergencia. La pasada temporada no logró remontarle el vuelo a un Elche repleto de problemas y ya hundido, y fue finalmente destituido en vistas a que el conjunto ilicitano preparara su transición hacia la Segunda División con un hombre de confianza de la propiedad argentina como Sebastián Beccacece.
Machín se crío a apenas 15 kilómetros de Aragón, en la localidad soriana de Gomara (aunque está afincado en Gerona), y se forjó como técnico en el Numancia después de dejar el fútbol a los 23 años por una lesión. En el club soriano trabajó en las categorías inferiores, fue segundo entrenador y terminó a los mandos del primer equipo, antes de pasar al Girona. Después de varias temporadas asaltando el ascenso -entrenaba a los catalanes cuando el Zaragoza protagonizó en 2015 aquella histórica remontada-, logró meterlos en Primera División con un fútbol muy ofensivo, reconocible, lo que se llamó el “sello Machín”.
¿Quién es Julio Velázquez?
El Real Zaragoza también tiene en su abanico de candidatos el nombre de Julio Velázquez, salmantino de 42 años. Entrenó la pasada temporada en Holanda, en el Fortuna Sittard, donde le acompañó en el cuerpo técnico el aragonés Javier Chocarro, expreparador físico del Real Zaragoza. Después de destacarse como uno de los técnicos jóvenes más valorados de su generación, Julio Velázquez ha desarrollado los últimos años de su carrera fuera de España, entre Holanda y Portugal (Marítimo y Vitoria de Setubal). Entre medias, cogió a un desahuciado Alavés en Primera en el tramo final de la temporada 2021-2022, conjunto al que no pudo rescatar de un descenso inevitable. Antes, en 2020, tras su primera temporada en Portugal, estuvo muy cerca de firmar por el Tenerife de Juan Carlos Cordero.
Julio Velázquez se forjó en las categorías inferiores del Valladolid, pero quemó etapas a toda velocidad en el Villarreal, donde cruzó escalafones desde su segundo filial al primer equipo, en Segunda División. Despedido a mitad de temporada -le relevó Marcelino y ascendió al equipo-, se fue al Murcia, donde jugó la promoción de ascenso. De ahí, se le abrió la puerta del Betis, donde fue destituido, se marchó al Os Belenenses luso y regresó a Segunda para coger al Alcorcón y salvarlo dos años. De allí, firmó en 2018 con el Udinese en la Serie A aunque duró apenas dos meses de competición. Luego vendrían Vitoria Setubal, Maritimo, ese breve paso por el Alavés en Primera y la experiencia del pasado curso en Holanda. Es un entrenador con carácter, con una idea ofensiva y atrevida, pero versátil en sus planteamientos. Ante todo, pese a su juventud, tiene un temperamento firme en el manejo de los vestuarios.
De un perfil más bajo que Machín y con varias temporadas alejado del fútbol español salvo su breve paso por el Alavés; Julio Velázquez siempre ha estado bien relacionado con los entornos de Cordero y eso impulsa su candidatura.
