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Quinteros, con salida posible hacia el Bolívar de su país

El central internacional boliviano, que llegó hace un año del Inter de Miami de Jorge Mas y ha quedado casi inédito en el Real Zaragoza, puede irse al club de La Paz si se resuelve el año de contrato que le resta.

Jairo Quinteros, con el director general Raúl Sanllehí el día de su presentación con el Real Zaragoza.
Jairo Quinteros, con el director general Raúl Sanllehí el día de su presentación con el Real Zaragoza.
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Jairo Quinteros, defensa central boliviano del Real Zaragoza, tiene la posibilidad de salir del equipo rumbo al Bolívar de La Paz, capital de su país de origen (su familia está radicada en Cartagena, Murcia, desde hace muchos años). Así ha trascendido en las últimas horas en el entorno del club sudamericano, en el que Quinteros ya jugó en las ligas de 2020 y 2021.

Quinteros ha pasado prácticamente inédito su año de vinculación con el cuadro zaragocista. De 22 años  y 1,80 de estatura, fue un fichaje de última hora el 1 de septiembre, al cierre del mercado de verano, aunque estaba programado desde más de un mes antes por las sinergias generadas por la nueva propiedad del Real Zaragoza. Y es que Quinteros procedía del Inter de Miami de Estados Unidos, entidad presidida de manera compartida con la blanquilla por Jorge Mas Santos. Solo ha participado durante todo el curso en un partido, durante 12 minutos, en el campo de Butarque de Leganés, en la última jornada de la primera vuelta, en diciembre. La Romareda ni la ha pisado. 

A su llegada, a Quinteros le hicieron un contrato por dos temporadas con el Real Zaragoza. En propiedad, por lo tanto. Así que, ahora, su salida de la plantilla -deseada por el entrenador y el área deportiva por motivos obvios- requiere de dar una solución a ese segundo año de compromiso que está vigente contractualmente. 

Jairo sabe que en Zaragoza no va a jugar. Así se lo hicieron saber antes de marcharse de vacaciones tanto Fran Escribá como Juan Carlos Cordero (como a otros compañeros del vestuario, casos de Eugeni, Molina o Vada, con distintos matices). Pero tampoco tiene prisa por encontrar una solución definitiva, amparado por su vínculo laboral con el Real Zaragoza que llega hasta junio de 2024. 

Si la solución llega antes del 3 de julio, día en el que la plantilla blanquilla iniciará la pretemporada 23-24, será un hecho celebrado por Cordero, que está sumido en una larga y minuciosa labor de reconstrucción masiva de la plantilla. Si no, quedará como asunto pendiente ya con los jugadores de nuevo trabajando día a día en la Ciudad Deportiva. El Bolívar de La Paz puede ser quien acelere este caso de exceso de cupo que el Zaragoza del futuro inmediato ha de solventar. Su dorsal '15' es necesario para otro tipo de futbolista que pueda dar mayor rendimiento y solvencia en la temporada venidera. 

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