A ocho jornadas para el final, el programa de la liga pone de inmediato al Real Zaragoza dos partidos consecutivos en La Romareda, en siete días que van a ser de alto valor para su futuro inminente: las dos próximas jornadas, la 35 y la 36, las disputará en el estadio municipal frente al Granada y el Racing de Santander.

Ambos duelos, que de ser solventados positivamente por los zaragocistas servirán de acelerador de soluciones a las dudas y miedos que sobrevuelan el día a día del equipo desde hace meses, se dirimirán los dos próximos sábados, el 8 contra los granadinos (a las 16.15) y el 15 frente a los santanderinos (a las 18.30).

El primer adversario, el potente Granada, tendrá las especiales características que portan a estas alturas de la liga, cuando ya todo es decisivo, los candidatos al ascenso directo a Primera División. Y, además, con el aderezo –nada favorable, a priori, para los intereses del Real Zaragoza– de que el equipo andaluz (2º clasificado) perdió en la noche dominical en Gijón frente al necesitado y apurado Sporting contra todo pronóstico, lo que le impidió auparse al liderato y presentarse en Zaragoza en lo más alto. De este modo, los nazaríes, que es obvio que afrontan dos salidas encadenadas, llegarán el sábado a La Romareda con sus obligaciones de victoria multiplicadas notablemente por este patinazo en El Molinón, sin margen para otro error de este calibre.

Y el segundo envite, frente al Racing, va a ser un enfrentamiento entre iguales. Zaragocistas y cántabros caminan de la mano todo el año, sin pasar del puesto 14º, merodeando el 19º que tanto quema y sin dejar de hacer equilibrios sobre el precipicio de las cuatro últimas plazas de la tabla.

En este reto entre los históricos clubes zaragozano y santanderino habrá dentro de 12 días más que tres puntos en juego. Quien gane obtendrá doble efecto salvador, pues saldrá a flote con fortaleza a la par que atascará al otro en el fango. Importante dato es que el Real Zaragoza perdió 1-0 en la primera vuelta en El Sardinero. Además de vencer, el equipo blanquillo haría bien en hacerlo por más de un gol de diferencia y superar el ‘golaverage’ particular.