Azón, cuarto día al margen del resto del grupo

Iván Azón no está apto para entrenarse con el equipo y, en la mañana de este martes, tras escuchar la charla inicial de Juan Carlos Carcedo al inicio del segundo entrenamiento de la semana del Real Zaragoza en la Ciudad Deportiva, se marchó en solitario camino del gimnasio y de la mesa de masajes junto a los recuperadores. Es la cuarta sesión de trabajo que el '9' aragonés se pierde en lo que ya es la antesala del inicio de la liga 22-23, que tendrá lugar el sábado en Las Palmas entre la noche y la madrugada dominical. 

Según las pautas del nuevo cuerpo técnico zaragocista, cualquier jugador que no esté al cien por cien y sufra cualquier molestia muscular, tendinosa u ósea, debe parar de inmediato. Así se ha logrado que el mes y medio -casi- de pretemporada haya transcurrido este verano sin sustos relevantes en lo relativo a las lesiones propias del arranque de curso. Por eso Azón está siendo cuidado con mimo y, dada la cercanía del duelo en Canarias, con viaje obligado el viernes hasta el archipiélago en un vuelo vía Madrid, lo hace ser duda importante para contar con su sustancial concurso en un equipo que tiene carencias en el mecanismo ofensivo.

Entrenamiento del Real Zaragoza en la Ciudad Deportiva

Todo el mundo cruza los dedos para que el dolor que le impide correr, salta y golpear el balón con naturalidad vaya remitiendo progresivamente y, en las próximas 24 horas (o poco más), Iván Azón diga a los médicos que se siente mucho mejor. Eso es lo que buscan los responsables del área sanitaria del club, en una contrarreloj que a esta hora del martes no tiene respuesta contundente respecto de si el mejor anotador del equipo en los últimos siete meses va a llegar a tiempo o no de jugar en el estadio de Gran Canaria a las 23.00 del sábado.