Víctor: "La afición sabe que el equipo no se va a rendir"

Reponerse de una derrota como la encajada en el derbi aragonés el pasado lunes no es fácil, pero si algo bueno tiene este nuevo fútbol es que apenas concede margen para las lamentaciones. Solo cuatro días después de abandonar La Romareda tristes y enrabietados por haber caído de la forma más cruel, en el último suspiro y con una jugada polémica que decantó la balanza hacia el lado oscense, los jugadores del Real Zaragoza saltarán este viernes al césped de Montilivi (19.30, Vamos) con la misión de levantarse y exhibir el espíritu competitivo que su entrenador, Víctor Fernández, requiere hacia el objetivo del ascenso.

"Somos un equipo acostumbrado a recibir golpes fuertes. Espero que contra el Girona salgamos al campo con buena condición mental. Soy optimista porque los chicos me generan ese optimismo y tengo ilusión porque trabajo por el objetivo que persigue toda nuestra afición. Eso es suficiente para resistir y para no abandonar", declaró ayer el técnico del barrio Oliver, que considera que en este "camino duro" va a ser fundamental que el zaragocismo mantenga la fe.

"Hay que conservar intacta la ilusión por alcanzar nuestro sueño. Estamos en un lugar que habríamos firmado hace meses y la afición sabe que el equipo no se va rendir; esa es la única forma de alcanzar el objetivo", resaltó, y adelantó que otra de las claves estará en mantener las señas de identidad sobre el terreno de juego.

"En Extremadura volvimos a ser atrevidos, con buen manejo de la pelota y buenas transiciones. Frente al Huesca hicimos el partido más completo de los tres que hemos jugado en casa tras el parón. Fuimos un equipo homogéneo y, a pesar de tener momentos malos, sobre todo los primeros 30 minutos, después mejoramos y tuvimos tramos brillantes en la segunda parte. Por eso considero que, hacia este final de liga, es esencial que volvamos a ser nosotros mismos", advirtió un Víctor Fernández que contra el Girona se verá obligado a introducir cambios en el once titular por las bajas por sanción de Eguaras y El Yamiq. Circunstancia que obligará a otros jugadores a dar un paso al frente ante un bloque construido para ser campeón.

"Hemos hecho una temporada muy regular como visitantes y los antecedentes son buenos. Es importante mantener la competitividad fuera de casa contra un equipo complicado, con un presupuesto monstruoso en comparación con nosotros. Va a ser un partido que nos va a exigir lo mejor de nosotros mismos, más aún, teniendo en cuenta la necesidad de recuperar el terreno perdido contra el Huesca", subrayó Víctor, a las puertas de la primera de las seis finales que les quedan.

Por último, el entrenador del Real Zaragoza se refirió a la llegada de Francisco al banquillo gerundense, asegurando que está convencido de que el cambio influirá en la "motivación" de los futbolistas rivales. "Tienen poco tiempo para percibir modificaciones tácticas, pero sabemos las características técnicas individuales de los jugadores, que son de los mejores de la categoría, y el tipo de juego pueden mostrar. Estamos capacitados para sacar el partido adelante, pero todo pasa por hacer un gran partido en todas las facetas", finalizó.