La llegada de Paco Herrera al Real Zaragoza ha permitido al menos establecer un libro de ruta, una línea sobre la que comenzar a poner los cimientos del proyecto del equipo aragonés en Segunda División. Aporta el técnico catalán claridad y sencillez, en un discurso directo; no esconde la realidad y reconoce que le atrae la dificultad de la iniciativa que ahora tiene entre manos.

Se necesitaba esa rotundidad y claridad en la sala de prensa de la entidad blanquilla. Sumido el Real Zaragoza en la duda y la incertidumbre, aparece el nuevo técnico como un flotador, como un asidero al que agarrarse en los delicados momentos por los que atraviesa la entidad.

Ha dado el nuevo técnico las pautas de lo que quiere que sea la pretemporada, que se inicia el día 8 y tendrá una concentración de ocho días una semana después en Alcalá de la Selva. Solicita un ‘stage’ corto y pide partidos ante rivales de entidad, en los que se puede apreciar el nivel en el que se encuentra la escuadra en la antesala de la campaña. Ya se ha concretado un duelo con Osasuna y el Real Zaragoza perfila uno más con el Athletic.

Tiene claro, además, Paco Herrera las líneas generales de cómo ha de configurarse la plantilla. En la portería, confía en Leo Franco y Alcolea, y se lleva a la pretemporada a los dos juveniles, con los que confía en tener garantizada la plaza de tercer portero. Da por segura la salida de Roberto Jiménez.

En la línea de cobertura, Paco Herrera quiere garantizar la continuidad de Álvaro. Cuenta también con Abraham, José Manuel Fernández y Javier Paredes. Laguardia hará la pretemporada, facilitará la salida de Loovens y es consciente de la imposibilidad de contar con Sapunaru. A cambio, se ha allanado la continuidad del italiano Maurizio Lanzaro. Habrá que ver la evolución de Obradovic tras su lesión.

Por delante, el técnico quiere a Montañés, futbolista, como Álvaro, con bastantes ‘novias’ tras su gran campaña. Además, sostendrá el equipo con José Mari, Movilla y Víctor Rodríguez; y quiere ver la situación de Rodri y Edu Oriol –que en la pasada campaña no ofreció el rendimiento que se le exigía-. No entra en los esquemas Apoño ni Romaric y también se marchan Wílchez, Rochina y Carmona. Lo normal es que también salga del equipo Pinter.

Busca gol en la vanguardia. Necesita un media punta con acierto ante la puerta rival –se baraja la opción del exlevantinista Barkero- y un par de delanteros que garanticen una treintena de goles en la campaña. La salida de Postiga está asumida y tampoco se cuenta con Luis García. Paco Herrera quiere dar galones a Jorge Ortí, aunque también debe ganárselos en pretemporada. El técnico no tiene claro qué hacer con Babovic, al que quiere juzgar también antes del inicio de la campaña. Quiere ver la evolución de Porcar y la recuperación física de Álamo.

El esquema general se irá concretando conforme pasen los días. El día 8 se inicia ya una pretemporada que debe devolver al Real Zaragoza a la máxima categoría.