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Logroño sigue siendo territorio vedado para el Bada Huesca
Los oscenses cayeron por 31-29 en un partido en el que su reacción final no fue suficiente.
A la undécima tampoco fue la vencida para el Bada Huesca. Los oscenses siguen sin saber lo que es imponerse a domicilio al Logroño, un rival ante el que en toda su trayectoria en la Asobal solo han logrado sumar un punto en su feudo. La visita de este sábado, que se cerró con un 31-29, se veía como la ocasión idónea para romper con ese maleficio. Los locales, conjunto que tradicionalmente ocupa los puestos altos de la tabla, tenían bajas y habían empezado mal el curso con un triunfo y tres derrotas. Sin embargo, siempre estuvieron por delante y supieron frenar el ataque de los de José Francisco Nolasco, especialmente en el inicio de la segunda parte, y mantuvieron la templanza cuando pasaron por sus peores minutos.
Porque, si algo no se le puede achacar al Bada es que lo intentó hasta el final. Como viene siendo norma, los oscenses acabaron bien el choque. Tras verse seis goles por debajo, en el desenlace reaccionaron e incluso se colocaron a uno (29-28). La ausencia de Dija, no obstante, se hizo notar.
La desventaja con la que llegó el Bada al descanso (16-13) fue la misma que se había encontrado en el inicio del partido. Los oscenses arrancaron precipitados, practicando en ataque un juego muy vertical. Tres de los cinco primeros goles del partido llegaron en lanzamientos de siete metros. Dos de ellos los marcó Hackbarth y fueron los que abrieron el marcador para los visitantes, que tardaron siete minutos en marcar con el balón en juego. Lo logró Pere Arnau con un lanzamiento lejano. Justo después se produjo el 6-3, colchón para los riojanos que fue la máxima del periodo.
La entrada de Miguel Malo sentó bien a los oscenses, que comenzaron a buscar más a los extremos. Adrià Pérez pudo entrar en juego y Cordies desde lejos mostró su buena puntería. Atrás, la defensa se endureció y Arguillas aportó paradas. Se consiguió restablecer las tablas, pero Serradilla y Diocou alejaron de nuevo a los locales. Hackbarth, ya fuera de tiempo, tuvo un siete metros en el que con su amago logró sentar a Jorge Pérez, que, no obstante, desde el suelo pudo parar.
En la reanudación, la dinámica no cambió. Fue el Logroño el que manejo la batuta. El Bada se atascó ante la meta rival y vio como paso a paso su rival se alejaba. Preciado marcó el 23-17 y poco después, antes de llegar al ecuador del periodo, Nolasco pidió tiempo muerto. Puso a los suyos en 5-1 en defensa y ordenó ataques rápidos. Esto último funcionó bien rápido, lo primero tardó algo más en tener efecto. Cordies, no obstante, marcó el 28-26 con siete minutos por delante.
Ahora fue el Logroño el que detuvo el partido. Después, Tercariol paró y Malo cantó el 29-28. La reacción no fue a más. Los últimos minutos exigieron combinar los nervios de acero con la rapidez, pero llegaron las precipitaciones y los fallos. Un mal pase de Cordies a Malo y una parada de Markelau ante Cardona en un siete metros que además había dejado a los locales con uno menos ejemplifican lo ocurrido. El Bada se volvió a casa con una nueva derrota, la tercera en cinco partidos. El 9 de octubre llegará al Palacio de Deportes el Anaitasuna (19.00).
Ficha técnica
Logroño La Rioja: Jorge Pérez (p), El Korchi (3), Rubiño (2), Diocou (6, 5p), Serradilla (9), Javier Rodriguez (1), David Cadarso (1), Markelau (p), Rivero (2), Kisselev (1), Javi García (2), Preciado (2) y Keita (2)
Bada Huesca: Arguillas (p), Pérez (4), Suarez, Arnau (3), Benites (1), Cucek (2), Rudolff Hackbarth (3), Tercariol (p), Montoya (2), Carmona (3p), Malo (3), Cordies (4), Mosquera (4)
Parciales: 4-2, 6-3, 8-7, 11-9, 12-12, 16-13 (descanso), 18-14, 21-17, 24-19, 28-23, 29-26 y 31-29 (final).
Árbitros: Jordi Ausás y Miguel Florenza. Excluyeron por dos minutos a los locales El Korchi (2 veces), Rubiño, Serradilla y Keita; y a los visitantes Montoya, Cordies, Mosquera y Suárez.
Incidencias: Partido de la Liga Asobal disputado en el Palacio de los Deportes de La Rioja ante unos 600 espectadores.
