baloncesto

¿Qué hace el adolescente más alto del mundo, de 2.31 de estatura, en Zaragoza?

El joven Olivier Rioux, de solo 17 años, compite con la selección de baloncesto U19 de Canadá.

Olivier Rioux, en primer término, este miércoles en el pabellón Eduardo Lastrada de Zaragoza.
Olivier Rioux, en primer término, este miércoles en el pabellón Eduardo Lastrada de Zaragoza.
Guillermo Mestre

A pesar de tener solo 17 años, Olivier Rioux no es un joven jugador de baloncesto más. Los 2.31 de estatura que registra, según la FIBA, le convierten en un fenómeno mediático que, inevitablemente, acapara la atención de todo el mundo. Este miércoles, el pívot compitió con su selección, el combinado U19 de Canadá, en un partido amistoso celebrado en el Stadium Casablanca de Zaragoza.

Rioux está catalogado como el adolescente más alto del mundo, según el 'Guinness World Records'. Accedió a este singular reconocimiento con solo 15 años, cuando ya alcanzaba los 2.26 de estatura. En los últimos dos años, el pívot todavía ha dado un pequeño estirón, hasta alcanzar sus 2.31 actuales.

El jugador canadiense no es el único alto en su familia. De hecho, proviene de una saga de talla grande. Su padre, exjugador de voleibol, alcanza los 2.07, mientras que su madre mide 1.85 y su hermano, 2 metros y 10 centímetros. Estos días, no es descabellado cruzarse con Rioux paseando por las calles de Zaragoza, ya que se encuentra concentrado en un céntrico hotel con la selección de Canadá.

Olivier Rioux realiza un mate sin levantar los pies del suelo, este miércoles en el Stadium Casablanca de Zaragoza.
Olivier Rioux realiza un mate sin levantar los pies del suelo, este miércoles en el Stadium Casablanca de Zaragoza.
Guillermo Mestre

Junto al resto de la expedición, el pívot permanecerá en la capital aragonesa hasta mañana viernes, cuando toda la selección se desplace a Calatayud para disputar un torneo internacional contra España, Brasil, Canadá y Japón. El primer asalto entre españoles y canadienses tuvo lugar en el Stadium Casablanca, donde el aragonés Lucas Langarita, jugador del Casademont Zaragoza, iluminó a su equipo hasta la victoria.

En el encuentro, a pesar de disputar solo 3 minutos y 9 segundos, Olivier Rioux fue otro de los inesperados protagonistas. Su impresionante envergadura captó todas las miradas. Desde lo más pequeños, que incluso le solicitaron en múltiples ocasiones una fotografía para el recuerdo, hasta los más mayores. El canadiense, con amabilidad, declinó todas las propuestas.

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