fútbol. segunda división b
El Ejea quiere sellar un nuevo billete hacia la permanencia en Segunda B ante el Olot
Teruel y Ebro disputarán el último derbi el domingo en Pinilla con objetivos totalmente antagónicos.
Llega la primera de las tres bazas de las que va a disponer el Ejea para firmar su permanencia en la división de bronce, cuando reciba en el Municipal, al Olot, encuentro que se disputará el sábado a partir de las (19.00).
No fallaron los de Guillermo Fernández en su fortín hace una semana. Sacaron adelante el complicado compromiso ante el Alcoyano (2-1), y pusieron pie y medio en la casilla de la salvación. Todo pinta de color de rosa, pero falta dar el golpe de gracia, que bien podría ser este fin de semana, ya que llega a Ejea de los Caballeros un rival que está de capa caída, pues no ganan desde hace siete jornadas.
Uno de los pocos puntos negros que trajo el partido de la semana pasada fueron las sustituciones de Nacho Lafita y de Ramón, por sendos problemas musculares, por lo que su participación mañana, estará en duda hasta el último momento. Quien no estará será el defensa Rubén Garcés, que está castigado al cumplir ciclo de amonestaciones.
EL ÚLTIMO DERBI ARAGONÉS DE LA TEMPORADA
El domingo (17.00) será el turno para el último derbi aragonés del curso. Pinilla acogerá el duelo entre Teruel y Ebro, con dos equipos inmersos en objetivos antagónicos.Comentaba Dani Aso a mitad de semana, que según sus cálculos, para conseguir la salvación iban a ser suficiente con alcanzar entre 41 y 42 puntos. Ellos tienen a día de hoy 38, por lo que las dos siguientes fechas, donde actuarán como locales, van a ser claves para aclarar su futuro. A pesar de la buena segunda vuelta realizada, la tremenda igualdad reinante, hace que todo siga pendiendo de un hilo.
Desde el club se ha hecho un llamamiento para apoyar a los suyos, y cada socio podrá ir con un par de acompañantes, que tendrán acceso gratuito. Además, en el descanso se sortearán dos camisetas oficiales del club, acicates para que el campo mudéjar presente una de sus mejores galas en una tarde clave. Para el Ebro, tras empatar el domingo anterior en Olot, el sueño de entrar entre los cuatro primeros pareció esfumarse definitivamente. No solo tendría que ganar los tres partidos que le quedan, sino que sus antecesores tendrían que errar en cascada. Además, una vez aprobado por la RFEF el nuevo formato de la Copa del Rey, a la que accederán siete conjuntos de cada grupo, los arlequinados tienen asegurada casi al 100% su plaza en la competición copera.
Aunque con estas premisas los de Manolo González parecen tenerlo ya todo hecho, no será fácil tumbar a un bloque que no ha perdido en el 2019 lejos de su terreno.
