La oscense María Eizaguerri hace historia en el ajedrez

María Eizaguerri continúa haciendo historia en el ajedrez. La primera vez que consiguió un título de campeona de España fue a los siete años, el sub 8, cuando también obtuvo la cuarta posición en el Europeo. La última, por ahora, el sábado en Salobreña (Granada). Entre un éxito y otro median otros nueve entorchados nacionales junto a hitos como alcanzar el número uno mundial a los 10 años o ser la jugadora más joven del país en alcanzar el título de Fide Máster, lo logró este mismo año. Ganar en ella casi es lo habitual, pero el triunfo de la última vez resulta especial, sin parangón en 119 años.

La aragonesa terminó primera en la clasificación general del Campeonato de España sub 18 de partidas lentas. Suena extraño, pero nunca una mujer lo había conseguido. Ella sí lo había logrado en el sub 16 de rápidas de 2019, pero lo de ahora, al ser por el método tradicional, todavía tiene más valor. Durante su concurso, solo se midió a rivales masculinos y únicamente sufrió una derrota.

Tras nueve rondas, finalizó con 7,5 puntos. Arrancó con cinco victorias consecutivas, en la sexta partida firmó tablas con el catalán Guerau Masagué, que sería subcampeón, y en la séptima pinchó. Se recompuso y en sus dos últimas citas volvió a imponerse. El tercer puesto fue para el navarro Juan Labiano. Los tres que subieron al podio tuvieron la misma puntuación. En el ranquin exclusivamente femenino, con seis puntos, por detrás de Eizaguerri quedaron la madrileña Lulu Zhou y la canaria Adhara Rodríguez.

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Al margen de la campeona, entre los aragoneses José Escartín fue sexto y el maestro internacional Pedro Ginés, noveno. Junto a éste último, otras de las grandes esperanzas del ajedrez español, Eizaguirre conquistó en el reciente Open Internacional de Benasque el Nacional de parejas mixtas y ambos han subido este domingo al podio en el Campeonato de España sub 18 de rápidas. Eizaguirre ha sido la tercera en la clasificación femenina y Ginés el segundo en la general.

Eizaguirre, oscense, comenzó a jugar al ajedrez a los cuatro años de la mano de un vecino de Cuarte. Su padre, Antonio Eizaguirre, es matemático informático y su madre, Elena Floris, genetista, pero ninguno de los dos jugaba con los peones, los alfiles, las torres, los caballos, la reina y el rey, por lo que sus inicios casi fueron por casualidad. Después, viendo que tenía interés, en casa adquirieron un libro de ajedrez para niños, a continuación se apuntó en la extraescolar de su colegio, el Pirineos, y de allí saltó al Club Jaque de Huesca y al Jaime Casas de Monzón, uno de los más potentes de España.

Todo aquello fue la génesis de la actualidad, pero con 16 años solo se puede mirar hacia el futuro. Allí aparece la Olimpiada de ajedrez, prevista para 2022 en Moscú y el título de gran maestra, la mayor distinción existente. Para alcanzar todo eso y lo que se proponga cuenta con el apoyo de su familia que va desde lo excepcional, organizó un ‘crowfunding’ para poder ir al Mundial sub 14, hasta la logística diaria. Este domingo por la tarde arranca una competición internacional a través de internet. Para poder tomar parte en ella, el lunes viajará a Madrid, donde le aguardará su madre. Harán noche porque por la tarde tiene partidas y ya el martes por la mañana volverán a casa, de nuevo por la tarde tendrá que competir.