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El público de Teruel disfruta del espectáculo de la Baja Aragón a pesar del polvo y el calor
Espectadores llegados de todo el país se concentran en los tamos más espectaculares de la carrera.
Los tramos más espectaculares de la Baja Aragón se han llenado este viernes de público equipado con sombrillas y sillas plegables para presenciar el paso de los coches, motos y camiones seguidos de su estela de ruido y polvo. Aunque el número de aficionados ha sido menor que en anteriores ediciones, según han indicado varios asistentes, han llegado de todo el país.
El intenso calor y las polvaredas que levantan los vehículos al derrapar o simplemente al circular por caminos de tierra muy trillados no parece importar a los asistentes, que han aplaudido y celebrado el paso de sus pilotos favoritos.
Uno de los puntos más concurridos de la jornada ha estado en el enlace de la N-420 con la entrada a Cuevas Labradas, donde varios cientos de espectadores se han plantado para ver el final de etapa, dispuesto junto al trazado de la frustrada línea de tren Teruel-Alcañiz. Entre los asistentes, han estado Sebastià Canals y Marc Sampere, dos aficionados a los quad llegados de Tarragona que querían ver pasar a pilotos que conocen, aunque este año no compite su favorito, Dani Vila, ganador en anteriores ediciones de la Baja que no ha podido concurrir por un accidente.
Por su parte, Pilar Sanz, de Madrid, afirmaba preferir con diferencia las competiciones del mundo del motor que se disputan en tierra a las celebradas "sobre el asfalto". La madrileña ha reconocido que no le gusta el campo como lugar de ocio, salvo como escenario de carreras automovilísticas. Acude a la Baja Aragón "desde cuando se disputaba en Zaragoza" y se declara fan de Al-Attiyah, que "es el mejor".
Otros espectadores se estrenan en 2021, como Antonio Marta, de Teruel, que ha asistido por primera vez a la carrera y que se ha mostrado "impresionado" al ver pasar a "semejantes coches" por los caminos de la provincia. "Los camiones todavía darán más juego", aventura mientras ve bajar los vehículos por la cuesta que cierra la etapa de este viernes.
Francisco Torres también es un espectador novato de la Baja a pesar de vivir en Teruel, la ciudad anfitriona de la prueba. Reconoce que se lo ha pasado "muy bien" viendo la competición y augura que repetirá la experiencia en futuras ediciones.
Entre el público, el riesgo de contagio por la covid-19 ha pasado desapercibido en la confianza de que la celebración de la prueba al aire libre, con amplios espacios y sin aglomeraciones, evita el riesgo de infección. Aún así, la gran mayoría de los asistentes no se ha quitado las mascarillas mientras ha durado la competición.
