sucesos

Una madre asegura que su vida “está en peligro” tras volver a ser agredida por su hijo en Zaragoza

El agresor tenía una orden de alejamiento que le impedía acercarse a la víctima, a la que ya atacó en Nochevieja. La Policía Nacional lo detuvo en la madrugada del miércoles en el barrio de Las Fuentes.

El detenido fue trasladado a primera hora de ayer al juzgado de guardia de Zaragoza.
El detenido fue trasladado a primera hora de ayer al juzgado de guardia de Zaragoza.
Guillermo Mestre

Una vecina del barrio de Las Fuentes de Zaragoza se vio obligada a llamar esta semana a la Policía Nacional tras volver a ser agredida por su hijo en su propia casa. La mujer, a punto de cumplir los 70 años, ya lo denunció por la paliza recibida la pasada Nochevieja, cuando Daniel C. G., de 31 años, se saltó la orden de alejamiento que le impedía acercarse a su madre y se plantó en el domicilio familiar. Cuando ella le dijo que no podía estar allí y quería que se marchase, el vástago comenzó a insultarla y golpearla. Tras este nuevo ataque, la mujer asegura que su vida “está en peligro”.

Los hechos que han vuelto a llevar a este individuo al calabozo se produjeron en la madrugada del pasado miércoles, 7 de febrero. Como ocurrió durante las pasadas Navidades, Daniel C. G. acudió a casa de la víctima y se puso a proferir insultos. “Ojalá te mueras, hija de puta”; “te voy a matar, te voy a chafar la cabeza”, consta en la denuncia que llegó a decirle. No conforme con ello, la zarandeó, le dio un puñetazo en la cabeza, la cogió del pelo y la lanzó contra una puerta. El agresor estaba muy violento y su madre tenía mucho miedo, por lo que esta se inventó una excusa para abandonar el domicilio. De hecho, le dijo que bajaba a pasear a los perros a la calle, pero aprovechó ese momento para llamar a la Policía e informar de lo que estaba ocurriendo.

La sala del 091 movilizó enseguida a la patrulla más próxima, que tras acceder al piso de la denunciante encontró a Daniel C. G. tirado en la cama de uno de los dormitorios. Al percatarse de la llegada de los agentes, este intentó esconderse detrás de un armario, pero no le sirvió de nada. El hombre dijo saber que pesaba sobre él una orden de alejamiento que le impedía aproximarse a menos de 200 metros de su madre. Sin embargo, no supo justificar de ninguna manera por qué se la había saltado.

El hombre fue arrestado y trasladado a comisaría como presunto autor de un delito quebrantamiento de condena, pero la mujer tiene miedo de que dentro de unos días vuelva a verse en la misma situación. E incluso de que una de estas palizas pueda tener consecuencias más trágicas. Porque, tras declarar ante el juez de guardia asistido por los letrados Carmen Sánchez y Luis Marcén, este hombre volvió a quedar en libertad.

Abuso de alcohol y violencia

La denunciante está convencida de que es el abuso del alcohol el que lleva a su hijo a comportarse de una forma tan violenta. Ella misma explicó a los policías que la auxiliaron el pasado miércoles que el investigado “bebe mucho y no se controla”. Al parecer, esa noche, antes de atacarla, el hombre había estado bebiendo whisky directamente de la botella.

Pero parece que no es la mujer la única que ha sufrido los estallidos de ira de Daniel C. G., contra el que hay abierta otra causa por empujar a un vecino el pasado septiembre por las escaleras. Pero en su ficha policial constan bastantes reseñas, no solo por violencia doméstica, sino también por delitos de resistencia y desobediencia, hurtos o amenazas

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión