Uno de los detenidos por matar a golpes a un indigente en Zaragoza había huido a Tudela
Huyó de la capital aragonesa tras la agresión. Los dos presuntos homicidas, uno exboxeador, matenían rencillas con la víctima.
Un hombre de 56 años, identificado como Florin T., murió el pasado 8 de enero en la uci del Hospital Miguel Servet donde se encontraba desde el día anterior en estado crítico a consecuencia de una salvaje agresión. En ese momento se desconocía la autoría de la mortal paliza, pero la Policía Nacional consiguió identificar pocos días después y detener como presuntos autores a Florentin L. D., de 57 años y exboxeador, y Georgica D., de 51, ambos de origen rumano, la misma nacionalidad que el fallecido.
Los dos fueron puestos a disposición judicial el sábado, 13 de enero, y el titular del Juzgado de Instrucción número 7, Rafael Lasala, en funciones de guardia, los envió a prisión como autores de un delito de homicidio.
La Jefatura Superior de Policía de Aragón informó de que la agresión se produjo en la noche o madrugada del 7 de enero. Varios viandantes llamaron alarmados al 092 para avisar de que un hombre estaba tirado en el suelo inconsciente, sangrando abundantemente por la cara y la cabeza y aparentemente gravemente herido, junto a la gasolinera de Cepsa del paseo de Echegaray y Caballero. Los servicios sanitarios lo trasladaron al hospital e ingresó directamente en la unidad de cuidados intensivos, de donde ya no salió con vida.
El herido no llevaba encima ningún documento que sirviera para identificarlo. No obstante, la investigación que inició el Grupo de Homicidios de la Policía Judicial permitió averiguar que se trataba de un hombre de 56 años de edad, de nombre Florin T., que en esos momentos vivía o malvivía en la zona de chabolas que resurgió hace pocos años bajo la pasarela peatonal, junto a la desembocadura del río Huerva, muy cerca del asentamiento que hay también debajo del paseo de Echegaray y Caballero.
Los agentes se entrevistaron con las personas sin techo que convivían con la víctima y descubrieron que el fallecido ya había tenido otros altercados con dos hombres de su entorno más cercano con los que había coincidido en el albergue municipal de Zaragoza, situado en la calle de Alonso V. Además, uno de ellos también vivía bajo el puente.
Los describieron como dos hombres muy corpulentos, uno de ellos, el más joven, de cerca de dos metros de altura y musculado. Según explicaron fuentes policiales, varios les indicaron que habían llegado a alardear en público de haber pegado y machacado la cabeza a la víctima.
Su relato coincidía tanto en la descripción de las lesiones, puesto que tenía la cara y la cabeza destrozadas, así como golpes en las extremidades y el torso (presentaba varias costillas rotas) como en las horas y fecha donde fue hallado el agredido. No obstante, la agresión se habría producido en la ribera del río y el hombre llegó herido hasta la gasolinera, donde se desplomó en el suelo.
Tras identificar a los presuntos agresores, el Grupo de Homicidios comenzó su búsqueda y organizó un dispositivo que dio sus frutos el pasado día 11. No fue fácil, pues uno de los presuntos agresores, Florentin L. D. fue detenido en la plaza Padre Laza de Tudela (Navarra), mientras que a su colega, Georgica D., lo localizaron el mismo día en el edificio Trovador, junto al parque Bruil, una zona donde también se reúnen personas indigentes.
Los sospechosos se acogieron a su derecho a no declarar ante la Policía y el juez aunque uno de ellos preguntó con sorpresa: "¡Ah! ¿pero ha fallecido?", para luego añadir que la víctima se había metido con su familia, como queriendo justificar la agresión.
Los dos presuntos autores tienen antecedentes. Georgica D. ha sido detenido en siete ocasiones por robos con violencia, hurto y relacionado con un homicidio en Huesca en 2015, mientras que a Florentin L. D. le consta otro arresto anterior por lesiones.
