Vivienda
Esta curiosa casa del distrito Oliver se lleva todas las miradas
Tiene criterios 'passivhaus' y su aspecto llama la atención a cualquier viandante.
Las marcadas líneas rectas del revestido de porcelánico gris oscuro de esta vivienda contrastan con el elemento blanco de cubierta inclinada. Su forma se adivina desde el exterior. En la calle de Espronceda, en el distrito Oliver, asoma una obra arquitectónica que se lleva todas las miradas: el proyecto 'Sunset'.
Aragón conserva tanto un gran patrimonio arquitectónico antiguo como moderno, muestra de ello son los premios dedicados a obras de diseño de arquitectos, como Fernando García Mercadal, el Trofeo Ricardo Magdalena... Hay muchas casas escondidas que harían las delicias de los más curiosos. Una de ellas es la ya citada del estudio zaragozano Metro 7, un proyecto desarrollado en una parcela con vistas al Moncayo, que ha resultado en una unifamiliar de 325 metros cuadrados de superficie.
"Se caracteriza por un consumo energético muy bajo, domotización de instalaciones y acabados acogedores", describen desde Metro 7. Así, la vivienda se desarrolla en dos volúmenes: uno de líneas rectas y marcadas de revestido de porcelánico de grandes dimensiones de Dekton gris oscuro, que contrasta con un elemento blanco de cubierta inclinada que contiene la escalera y la doble altura del salón.
Además, a simple vista se pueden apreciar unos vuelos metálicos blancos que rodean la vivienda como protección solar y elemento unificador. Se completa con un recoleto "patio inglés", que permite la iluminación natural del sótano, dotándolo además de una pequeña zona ajardinada.
Pero la principal virtud de este inmueble no se ve: altos niveles de aislamiento térmico en continuidad, un sistema de ventilación mecánica con recuperación de calor y suelo radiante. De hecho, tiene el sello 'passivhaus', la máxima certificación posible de eficiencia energética, lo que conlleva un ahorro en la factura de la luz y una mayor sensación de bienestar. Asimismo, desde el estudio apuntan que tiene instalaciones fotovoltaicas en la cubierta, por lo que es autosuficiente.
La ventilación de este inmueble cuenta con dos recuperadores de calor. Así, se puede regular la temperatura de toda la vivienda "para que sea homogénea" y, además, mejora la calidad del aire. Se ha proporcionado un sistema de aerotermia de alta eficiencia que produce tanto calor como frío. "La máquina exterior de la bomba de calor se ubica en cubierta y la interior en el sótano junto al recuperador de calor", especifican desde Metro 7. Nada queda a la vista. Lo mismo ocurre con el suelo radiante, una moda cada vez más presente en las rehabilitaciones y en las promociones y que desplazan al radiador del panorama 'hogarístico'.
"La estructura portante se compone de pilares y pantallas de hormigón armado sobre las que apoyan forjados bidireccionales de hormigón de 22 centímetros de espesor", declaran. Debido al desnivel que existe entre la parcela y su entorno, el muro de sótano posterior tendrá una parte enterrada y otra que formará parte del encanto de la fachada del edificio. Mientras el sótano de la vivienda simula un cubo de hormigón visto, el cubo blanco está hecho en termoarcilla SATE y el resto de la fachada queda cubierta con porcelánicas del material Dekton.
El aislamiento térmico también es uno de los fuertes del inmueble. En el sótano, los muros de hormigón armado se revisten exteriormente por aislamiento térmico (XPS). En el interior de la casa se utilizan placas de yeso laminado, pero dejando visto el hormigón en la parte posterior de la parcela y en la fachada del patio, que "sigue la solución constructiva de las plantas superiores". El resultado es un hogar que se lleva todas las miradas, aunque su fuerte también está en lo que no se ve.
