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El gasto en luces de Navidad de Zaragoza en los últimos 5 años iguala al de los 20 anteriores
La inversión por habitante en la capital aragonesa sigue por detrás de ciudades como Vigo, Palma o Madrid.
Zaragoza se ha sumado a la fiebre por las luces de Navidad. Es un hecho que se puede comprobar en la calle, al pasear bajo el manto led de Alfonso I, las auroras boreales de San Felipe y las estrellas fragmentadas de Independencia; o al contemplar el Belén 3D, los doce almendros de ocho metros y la bola luminosa gigante. Pero también lo confirman los números. El Ayuntamiento de la capital aragonesa ha invertido de media en los últimos cinco años casi cuatro veces más que lo que se gastó en las casi dos décadas anteriores en estos adornos.
Desde que asumió el bastón de mando el exalcalde y actual presidente de la DGA, Jorge Azcón, hasta este ejercicio ya bajo el mandato de Natalia Chueca, se han destinado en suma 3.193.000 euros, una cifra ligeramente superior a los 3.141.000 euros que fueron a parar a las luces navideñas desde el año 2000 hasta 2018. Se reforzó la decoración especialmente tras la pandemia, ya que se buscaba animar la campaña tras las pérdidas económicas que trajo consigo la crisis sanitaria para la mayoría de sectores y, al mismo tiempo, levantar el ánimo de los ciudadanos tras los meses de confinamiento y restricciones.
Evolución de la inversión en luces en Zaragoza
Entonces se llegó a invertir dos años seguidos 800.000 euros, y aunque la regidora ha destinado en esta ocasión 593.000, en total son 1,1 millones de euros los que van a parar a la programación navideña. Desde el Ayuntamiento aseguran que se trata de un "proyecto estratégico" con el que pretenden que esta celebración sea "un atractivo a nivel nacional", así como favorecer el comercio.
Fue, de hecho, a comienzos de los 2000 cuando los empresarios se quejaron de que el Consistorio únicamente iluminaba las calles del centro, lo que hizo que el gobierno de José Atarés incrementara el gasto para llegar a más zonas de la ciudad. También creció en los años previos a la Expo, bajo el mandato de Juan Alberto Belloch, y se redujo justo después, a partir de 2008, a consecuencia de la crisis económica y porque se reutilizaron elementos decorativos de la feria internacional. Aunque la verdadera austeridad llegó entre 2010 y 2015, cuando apenas se gastaban 50.000 euros al año, y subió ligeramente hasta los 100.000 en los tres últimos años del exalcalde Pedro Santisteve.
Aunque ahora el gasto es mucho más alto, Zaragoza sigue sin estar en el podio de las ciudades que más destinan según sus habitantes. Lo encabeza y muy de lejos Vigo, que gasta 8,11 euros por vecino, frente a los 0,85 de la capital aragonesa. Palma gasta 2,96, Sevilla, 1,76 y Madrid, 1,31.
