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Tarazona estrena la tecnología de luz ultravioleta que garantiza la calidad del agua de boca

Torrellas ya cuenta con este sistema de desinfección, mientras Los Fayos y Novallas están a la espera de instalarlo.

Imagen de la potabilizadora de Tarazona.
Imagen de la potabilizadora de Tarazona.
Guillermo Mestre

Más de dos meses después de que los casi 11.000 vecinos de Tarazona se quedaran sin agua potable a causa de la contaminación del río Queiles por el protozoo ‘Cryptosporidium’ y un brote de gastroenteritis dejara 520 afectados, las últimas restricciones para su consumo están a punto de ser un mal recuerdo. La localidad tiene previsto poner en marcha la semana que viene en la estación de agua potable los equipos de luz ultravioleta de tratamiento y desinfección que se han instalado en los últimos días con el fin de garantizar el abastecimiento frente a la posible contaminación por diversos parásitos.

El presidente aragonés, Jorge Azcón, y el consejero de Sanidad, José Luis Bancalero, asistirán mañana a la presentación del sistema de control del río Queiles en las instalaciones turiasonenses. El Instituto Aragonés del Agua (IAA) ha asumido los 210.00 euros que ha costado esta tecnología y los trabajos necesarios para su implantación.

El IAA también paga los equipos similares de Torrellas, Los Fayos y Novallas, los otros tres municipios afectados por la contaminación del Queiles.

Una vez que estos reactores con lámparas empiecen a funcionar, la normalidad se recuperará por completo. Desde el pasado 2 de noviembre los habitantes de Tarazona y Torrellas ya pueden beber del grifo. No obstante, hasta que se disponga del tratamiento ultravioleta, Salud Pública recomienda que sigan sin consumirla ni utilizarla para lavarse los dientes las personas mayores, inmunodeprimidas y menores de 6 años. Con estos consejos presentes, Los Fayos recuperó el consumo de agua de boca el 3 noviembre y Novallas fue la última población en hacerlo seis días después, el 9 de noviembre.

Torrellas estrenó su lámpara de luz ultravioleta ya el pasado jueves. Mientras, en Los Fayos están a la espera de que las labores para colocarla se lleven a cabo la semana que viene. "La obra civil está terminada. Se ha tenido que construir una caseta acoplada al depósito de unos 15 metros cuadrados para el nuevo dispositivo. El material ha llegado y a lo largo de la semana que vienen vendrán a colocarlo", explicó el alcalde, José Ángel Alonso.

Con algo más de retraso va esta actuación en Novallas donde, por el momento, no han llegado las piezas del equipo ultravioleta. "Nos han mandado instrucciones para que el alguacil conozca cómo va a funcionar, pero estamos esperando el material", señaló el regidor, Pedro Lapuente. "Quiero pensar que a lo largo de la semana que viene tendremos buenos noticias", añadió.

El foco, una incógnita

El foco del contagio sigue siendo una incógnita. Por la concentración de ooquistes del ‘Cryptosporidium’ en los tramos del río Queiles se determinó que la contaminación tienen su origen en la parte del cauce que discurre por Soria, aguas abajo de la localidad de Vozmediano. Pero ninguno de los análisis que se han llevado ha cabo ha sido determinante. La última hipótesis que había cobrado fuerza era que el problema había sido causado por aguas torrenciales que habían llegado al cauce.

Desde el Ayuntamiento de Tarazona se ha exigido que continúen las averiguaciones y se depuren responsabilidades. El caso está siendo investigado por la Fiscalía de Zaragoza.

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