La planta de compostaje de Calatayud tiene 20.000 kilos de materia orgánica en proceso
Un total de 1.200 familias ya participan en el programa de separación en el contenedor marrón que puede ayudar a reducir el coste en la tasa de recogida
El aprovechamiento de los residuos orgánicos en Calatayud sigue avanzando y después de cinco meses en funcionamiento ya cuenta con 20.000 kilos que podrán ser utilizados como fertilizante. Todo ello mediante la actividad de la planta de compostaje que se ubica cerca del paraje de 'Las Planas de Armantes', en el entorno del vertedero, instalaciones que, gestionadas por el Ayuntamiento de Calatayud, se abastecen con los desperdicios de un total de 1.200 familias que los depositan en los más de 70 contenedores marrones distribuidos por toda la ciudad.
"El proceso comienza con la separación de la fracción orgánica respecto de lo que es fracción resto. Luego, en bolsas compostables se lleva a los contenedores marrones, que se abren con llave y cada dos días se recogen. Una vez aquí se vacía el camión en hileras y se vuelve separar de forma manual los impropios -como estropajos o botes de yogur- y se supervisa la degradación", explica Marcial de la Asunción, técnico municipal de Medio Ambiente. En esas hileras, bajo una carpa, se controlan los niveles de temperatura, aireación y humedad para que se convierta en compost.
Para eso, mediante un tractor y una volteadora se favorece la oxigenación de los materiales, hasta que son cribados y depositados. Posteriormente, se realizan analíticas para comprobar su composición y, llegado el punto, pasará a distribuirse. "El objetivo es usarlo como abono para los parques y jardines municipales y las familias que participan también pueden recibirlo como compensación", apuntaba el responsable. La participación en esta separación se hace a través de la campaña "Calatayud crece con la orgánica", a la que los vecinos se pueden apuntar en el propio edificio del ayuntamiento.
Desde allí se distribuye un conjunto de un cubo aireado de 10 litros, un rollo de bolsas y una llave para el contenedor propio. De forma progresiva, ha ido aumentando el número de participantes, que consideran una "buena respuesta" y desde el Consistorio buscan que siga creciendo. Según la concejal del ramo, Ana Isabel García, de generalizarse a toda la ciudad y hacerse de forma correcta, la tasa anual que se abona por la recogida de basuras y su tratamiento podría rebajarse en un 40%.
Para eso, el Ayuntamiento trabaja en la ampliación de unas instalaciones que contaron con un desembolso de 277.000 euros en obra civil y maquinaria y unos 90.000 en equipamiento y campañas publicitarias, con una subvención del Gobierno de Aragón de casi 98.000 euros. Así, por una parte, se quiere tener más superficie de trabajo e incorporar una abridora de bolsas y un tromel de afino para mecanizar esa parte del reciclado. Por otra, se busca ampliar el número de contenedores, bolsas compostables y otros elementos.
De la primera se han solicitado fondos del Plan de Recuperación, Transformación y Resilencia por valor de 301.000 euros y 240.000 para la segunda de las líneas. Se pretende llegar de esta forma a los grandes generadores, como restaurantes, comedores, residencias, el hospital, y la Academia de Logística, y a los barrios pedáneos de Embid y Torres, ya que Huérmeda ya tiene una en marcha.
A su vez, en las actuales instalaciones, se quiereB para acoger visitas de colegios.
