El muerto en Calatayud es el padre del joven rejoneador aragonés Mario Pérez Langa

El joven entrena con sus caballos en la localidad de Villafeliche, por lo que ha acudido de inmediato al lugar del suceso al conocer la luctuosa noticia.

Derrumbe del edificio en Calatayud que ha causado la muerte de un trabajador.
Derrumbe del edificio en Calatayud que ha causado la muerte de un trabajador.
M. Llorente

El accidente laboral registrado este martes durante el derribo de un edificio en ruinas de Calatayud ha salpicado también al mundo del toro, ya que el fallecido es el padre del rejoneador bilbilitano Mario Pérez Langa. El joven tiene su cuadra y entrena con los caballos en la localidad de Villafeliche, por lo que al comunicarle lo ocurrido se ha presentado de inmediato en el lugar del suceso, un inmueble situado justo enfrente de la estación de trenes de la ciudad.

El padre del artista conducía una excavadora cuando parte del edificio de viviendas que empezó a demolerse este pasado lunes se le ha venido encima. Los hechos se han producido en torno a las diez de la mañana y aunque las asistencias sanitarias han acudido pronto, nada han podido hacer por la vida del trabajador, de unos 60 años. Al parecer, los escombros han atrapado a la víctima, cuyo cadáver ha sido trasladado posteriormente a las instalaciones del Instituto de Medicina Legal en Aragón para practicarle la autopsia.

La Policía Nacional se ha desplazado al lugar del suceso para comenzar una investigación que complementará a la que lleve a cabo la Inspección de Trabajo, ya que el juez de Calatayud al que toque instruir el caso deberá aclarar si se habían respetado todos los protocolos y medidas de seguridad. El sindicato CC. OO. ha emitido esta mañana un comunicado lamentando lo sucedido y exigiendo que se depuren posibles responsabilidades.

Mario Pérez Langa es el único rejoneador aragonés en activo y su trayectoria en el mundo del toro avanza a pasos firmes. El bilbilitano cumple 33 años este año, pero lleva preparándose desde que tenía solo 11, ya que tanto su abuelo como su padre tenían una cuadra con burros y caballos que hizo que él se sintiera desde muy pequeño atraído por el mundo ecuestre. El joven tomó la alternativa en la plaza de toros de Zaragoza, y la confirmó en 2019 en el coso madrileño de Las Ventas. Se ha acartelado ya en muchos ruedos importantes, pero guarda un especial recuerdo de su puerta grande en Huesca y las cuatro orejas que cortó en Teruel.

El duro golpe de la muerte de alguien al que estaba tan unido como su padre llega en plena temporada taurina, en la que Mario Pérez Langa está anunciado en bastantes carteles. Uno de los más próximos, el día 30 de julio en Lodosa.

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