Zaragoza
Zaragoza desbloquea los suelos del Portillo para que estén en obras en 2024
El Adif presenta al Ayuntamiento el proyecto de reparcelación de los suelos ferroviarios, donde se prevé una inversión de más de 30 millones.
Después de una negociación de años marcada por los vaivenes, el Ayuntamiento de Zaragoza y el Administración de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) han dado el paso definitivo para cerrar la cicatriz del Portillo. El organismo estatal acaba de presentar en el Consistorio el proyecto de reparcelación, que reparte los derechos y las cargas del sector entre los distintos propietarios, por lo que ya no hay obstáculos para la operación más allá de completar el diseño de la urbanización. Las obras podrían comenzar a mediados o finales de 2024.
El acuerdo afecta a 106.624 metros cuadrados de suelo en el triángulo que forman la avenida de Anselmo Clavé, Escoriaza y Fabro y San Josemaría Escrivá de Balaguer, donde confluyen de tres barrios de la ciudad (Las Delicias, Casco Histórico y Centro). Allí está previsto construir un gran parque de casi 42.000 metros cuadrados y una torre de unas 20 alturas con capacidad para unas 220 viviendas. Se ha estimado que el valor del suelo residencial es de 4,8 millones de euros.
“Ya era hora. La cicatriz del Portillo dejará de ser una cicatriz”, ha dicho el concejal de Urbanismo, Víctor Serrano, que ha calificado el acuerdo de “histórico”. En este sentido, ha recordado otros vacíos urbanos que se han desatascado durante su etapa de gestión, como los suelos de Aceralia, Averly, el antiguo colegio Jesús y María o la prolongación de Tenor Fleta. Serrano ha apuntado que el barrio de Las Delicias es uno de los que menos ratio de zonas verde por habitante tiene en la ciudad.
El acuerdo zanja las discrepancias que habían mantenido el Ayuntamiento y el Adif respecto a cómo se tenían que repercutir los costes de la operación. Finalmente, el Consistorio aportará 1,5 millones de euros a la urbanización de la zona, que suma un total13,7 millones.
La operación implica la división del sector en dos zonas. La primera, más próxima a la avenida de Escrivá de Balaguer, se concentran las viviendas y el 75% del parque (56.171 metros cuadrados, el 52,6% del sector). El coste de urbanizar este lugar es de 7,2 millones. Es el que puede avanzar más rápido, dado que no está afectada por los usos ferroviarios.
En la segunda, situada más cerca de la avenida de Goya y donde irá el 25% restante de la zona verde, y requiere 6,5 millones para la urbanización. Allí es donde están las infraestructuras ferroviarias (Correos, centro de control del tráfico ferroviario), que ahora se podrán trasladar a la estación Zaragoza-Delicias. En total, la inversión global de 31,6 millones de euros, de los que 17,8 corresponden al traslado de las infraestructuras ferroviarias y el resto a la urbanización del ámbito (los 13,7).
Ahora, una vez tramitada la reparcelación, el ente estatal cederá el suelo a Zaragoza Alta Velocidad, sociedad en la que participan Adif Alta Velocidad (30%), Adif (7,5%), Renfe Operadora (12,5%), la DGA (25%) y el Ayuntamiento de Zaragoza (25%). Será ZAV la que saque a concurso los suelos residenciales y ejecute las obras del parque.
La zona 2 es la más compleja en su ejecución y es la que ha retrasado el acuerdo. Allí se encuentran todas las infraestructuras ferroviarias. Esto no será posible hasta que se produzca el traslado de esas instalaciones que permiten controlar la circulación de los trenes. Las nuevas dependencias del denominado Control de Tráfico Centralizado estarán en el vestíbulo de llegadas de la estación. Por otro lado, el edificio de Correos allí ubicado se tendrá que derruir, dado que no tienen ningún grado de protección.
De los 17,82 millones que supone esta obra, ZAV se compromete a abonar un importe máximo de 13,55 millones. Adif Alta Velocidad pondrá 2,06 millones de euros y Adif otros 2,21. El plazo de ejecución de las obras es de cuatro años.
