Vivienda

El padrón detecta 323 pisos okupados en Zaragoza, el triple que en 2015

El número de okupas, de los que el 65% son españoles, se duplica en seis años. El Ayuntamiento ha revisado 430 viviendas ‘patera’.

Urbanismo tapia los accesos al edificio de la calle de Cerezo en el que se incendió una casa okupa.
Urbanismo tapia los accesos de un edificio de la calle Cerezo que fue okupado.
Francisco Jiménez

El fenómeno de la okupación de vivienda sigue creciendo en Zaragoza. Así lo refleja el padrón del Ayuntamiento de Zaragoza, que ha constatado que el número de pisos que se encuentran en esta situación casi se ha multiplicado por tres en seis años: se ha pasado de los 125 que se contabilizaban en 2015 a los 323 con los que se cerró el ejercicio 2021. El número de okupas empadronados se ha multiplicado por dos: de 427 personas a 1.007.

Así lo confirma el padrón del Consistorio, que recuerda que la ley obliga a que toda persona que viva en España esté empadronada, independientemente de que resida en su propia vivienda, de alquiler, en una infravivienda o en una casa que no sea de su propiedad. Según consta en el BOE de 2 de mayo de 2020, «la inscripción padronal es completamente independiente de las controversias jurídico-privadas sobre la titularidad de la vivienda». Por lo tanto, un okupa puede estar empadronado.

La normativa establece que se debe simplemente especificarse a la hora de empadronarse el domicilio donde se vive. Esto implica que una chabola, caravana, cueva e incluso la ausencia total de techo pueden figurar como domicilios válidos en el padrón. Lo que es obligatorio es estar inscrito.

Esta situación ha favorecido que muchos okupas se empadronen para acceder a la atención sanitaria o ayudas públicas. Si se analiza la serie desde 2015, el pico se produjo en 2019, con 377 pisos okupados y 1.277 personas viviendo en ellos, para bajar el año siguiente, el de la pandemia (233 viviendas y 921 personas). 

Respecto a la distribución por países, la mayoría de las personas empadronadas que están en una vivienda a la que no tienen derecho son de España. De las 1.077 personas, 644 tienen nacionalidad española, frente a los 363 extranjeros. Por países, 198 son rumanos, 43 argelinos, 37 marroquíes, 21 gambianos o 12 portugueses.

Además de en un piso okupado, muchos tienen que recurrir a los servicios sociales para poder acceder a un domicilio. Por ejemplo, a fecha 30 de noviembre de 2022 había 257 personas empadronadas en el Albergue municipal y otras dependencias públicas. La Casa de las Culturas tiene a 51 personas empadronadas y el centro municipal de servicios sociales de La Magdalena, a otras 32. De estas 257 personas, 128 eran españolas y 121 extranjeras, especialmente argelinas y marroquíes.

Por otro lado, se han reforzado los controles de los pisos ‘patera’, como se denominan aquellos que superan los 12 empadronados. Desde el año 2015, los funcionarios municipales han revisado la situación de 430, donde residían 5.462 personas. En la actualidad, se van a visitar 20 viviendas más.

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