La emoción y la pasión del Dance del Paloteo reinan en Longares
236 participantes retomaron esta tradición, que se repetirá el próximo viernes
Las calles de Longares volvieron a llenarse este viernes de emoción y pasión con la primera salida del Dance del Paloteo, tras dos años de ausencia por la pandemia. Intervinieron 236 participantes, agrupados en cuadros de cuatro, que hicieron un recorrido de unos 400 metros con inicio y final en el interior de la iglesia de la Asunción. Una multitud de personas distribuidas por las calles desde tiempo antes del comienzo presenciaron esta demostración, que rindió honor a los santos Vicente y Gonzalo y que se repetirá el viernes que viene para honrar a Virgen de la Puerta.
"Siento mucha vinculación con este pueblo y el dance es lo más característico y lo que más se vive. Tengo muchas ganas", reconocía Miguel Mariñoso minutos antes de la salida, para él su debut. Sagrario Cortés, con 33 años de experiencia, compartía la misma ilusión: "Es oír el himno de España, la música y los palos y te pone los pelos de punta. Es algo que no se puede explicar con palabras", apuntaba.
Lo decía enfundada con la indumentaria típica: calzado negro, pantalón o falda azul marino, faja roja a la cintura, camisa o camiseta blanca, y el cachirulo rojo y negro anudado al cuello, portando dos palos de madera de carrasca de medio metro rojos, y blancos en los extremos.
Para el alcalde, Miguel Jaime, era un día de "alegría inmensa" , que la gente "vive con mucha ilusión y emoción". "Es una muestra muy emocionante porque ves implicado a todo el pueblo", apuntaba Selena Pérez, de 21 años.
Declarada fiesta de interés turístico de Aragón, el origen, según la tradición, se remonta a 1668, cuando llegaron al pueblo las reliquias de los santos Vicente y Gonzalo, adquiridas en Roma por el eclesiástico Diego Escolano, hijo adoptivo del municipio.
