sucesos

Derrapes, trompos y un accidente en una concurrida carrera ilegal en La Cartuja

Dos conductores fueron detenidos por conducción temeraria tras protagonizar un choque ante cientos de personas.

Los conductores de dos vehículos chocaron entre ellos y fueron denunciados por un delito contra la seguridad vial.

Los dos detenidos el pasado sábado por conducción temeraria no eran dos conductores aislados que se juntaron para competir entre ellos, sino que formaban parte de una gran quedada a la que se habían apuntado cientos de personas y turismos para hacer exhibiciones de derrapajes, trompos y competiciones de velocidad en el polígono Empresarium del barrio de La Cartuja de Zaragoza. 

Además, tal y como revelan las investigaciones, el accidente que protagonizaron tampoco fue consecuencia de una carrera entre ambos, sino que uno de ellos embistió al otro al aproximarse a gran velocidad al cruce donde el primero estaba haciendo trompos y quemando rueda. En el vídeo que acompaña esta información puede verse cómo el turismo que hace giros está ocupado por un copiloto que saca medio cuerpo por la ventanill mientras el coche da vueltas y de pronto llega el segundo turismo y colisiona con él. Para fortuna del joven, en ese instante se había metido dentro del vehículo, lo que evitó que el otro impactara de lleno contra su cuerpo con consecuencias probablemente nefastas.

La negligencia de estos jóvenes no se quedó ahí, sino que decidieron que los gastos de la reparación de los coches no los iban a pagar ellos, sino que iban a correr a cuenta de sus respectivas compañías aseguradoras, como así lo está investigando la Policía Local. Para tramar el engaño, según fuentes policiales, movieron los vehículos a otro lugar distinto del punto de colisión y rellenaron sendos partes amistosos.

Los agentes que acudieron al lugar ante un requerimiento por un accidente pronto comprobaron que las cosas no habían sucedido tal y como estaban contando los conductores D. D. S., de 18 años, y V. I. A., de 22. A poco que inspeccionaron el lugar descubrieron marcas evidentes de frenadas en el asfalto. Los dos acabaron detenidos por conducción temeraria y estafa en grado de tentativa. La Policía Local continúa investigando los hechos, pero este diario ha podido saber que estas citas se repiten con bastante frecuencia, habitualmente los viernes. 

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