semana santa
Una procesión como hace 75 años, con esclavinas y capirotes ante el Prendimiento
Corría el año 1947 cuando un grupo de exalumnos de las Escuelas Pías fundaron esta cofradía de la Semana Santa zaragozana.
Capirote y túnica azul marino, con cíngulo y una esclavina blanca. Ese fue el primer hábito del Prendimiento y con el que este Miércoles Santo procesionaron 136 cofrades desde la parroquia de San Valero hasta San Cayetano. Ese fue el número de hermanos que salieron por primera vez hace ahora 75 años.
"La primera parte de la procesión será como la original, con dos hileras de cirios y el paso del Prendimiento, que data de 1847", explicó Fernando Balaguer, actual hermano mayor, antes de la salida. Otro detalle es que los niños del guión llevaron bonete hebreo, una curiosa prenda de cabeza que no es habitual en las calles de Zaragoza y que se han confeccionado de propio para esta salida procesional.
Tras el estandarte de tela, el resto de la procesión, como la sección de tambores, que se incorporó en 1953 y ahora es una de las más numerosas de la Semana Santa de la ciudad. También estaban las hermanas de mantilla acompañando a las cruces 'in memoriam'. En la primera procesión no hubo mujeres, ya que las primeras medallas a féminas se pusieron a partir de 1976, sin embargo, este miércoles sí que hubo hermanas con esclavina.
Los 136 cofrades fueron elegidos por orden de antigüedad, entre los que también estaban Eduardo López y Miguel Planas, dos de los fundadores de la cofradía, anunció Fernando Balaguer, quien también se vistió con esclavina, en su caso con la que en tiempos había procesionado su padre.
La Real y Calasancia Cofradía del Prendimiento del Señor y el Dolor de la Madre de Dios –como se llama oficialmente– fue fundada en 1947 por un grupo de exalumnos de colegios de las Escuelas Pías y en la actualidad cuenta con más de 1.000 miembros.
Sus capas blancas, que sustituyeron a las esclavinas, también acompañan en el resto de salidas a la Virgen Dolorosa –de 1900–, la peana del Cristo de Daroca –fechado de mediados del siglo XX– y con el Cautivo –de 2013–.
