Zaragoza
La campaña de vigilancia en Zaragoza reduce un 80% las infracciones por dejar basura en la calle
La Policía cursa desde agosto 277 sanciones, principalmente a negocios hosteleros.
Parece que la campaña de vigilancia y concienciación que inició el agosto pasado el Ayuntamiento de Zaragoza está obteniendo sus frutos. El gobierno PP-Cs se propuso poner coto a la falta de civismo y que las bolsas de basura se depositaran únicamente donde corresponde: en los cubos. Desde entonces, la Policía Local ha cursado 277 sanciones por dejar los residuos fuera de ellos, pero el ritmo de las infracciones se ha reducido un 80%. Mientras que en los primeros meses se detectaban alrededor de 25 por semana, ahora se ha quedado en unas 5.
La Policía Local reforzó el control sobre una treintena de puntos negros -que habían sido previamente detectados por la contrata de limpieza FCC-, en los que había reincidencia desde hacía tiempo y que han provocado múltiples quejas por parte de los vecinos de las calles afectadas. Son, sobre todo, zonas cercanas a establecimientos hosteleros y comercios de alimentación repartidas principalmente por el distrito Centro y el Casco Histórico, aunque también en otros barrios como el de Oliver. Durante este tiempo, los agentes han recorrido por las noches las calles más conflictivas, con patrullas de paisano, para detectar estas prácticas y proceder a las denuncias correspondientes.
En su mayoría, las calles más problemáticas tienen un gran número de bares y restaurantes y suelen ser muy frecuentadas. Algunas, como Cuatro de Agosto, Cinegio, José Pellicer Ossau o Blasón Aragonés, están ubicadas en el corazón del Tubo, la zona gastronómica más popular de la capital aragonesa. Otras de las más problemáticas, también por el entorno, son Don Jaime I, Conde Aranda o las plazas de España y Santa Marta, e igualmente se ha detectado reincidencia en puntos como Doctor Palomar, Laguna de Rins, Pamplona Escudero, Viola, Sebastián Banzo Urrea o Dr. Zamenhoff.
Junto al refuerzo de la vigilancia, también se está llevando a cabo una campaña de sensibilización entre los distintos negocios para informar de la necesidad de sacar los residuos en la hora y forma establecidos y de las alternativas de las que disponen. En concreto, tal y como recuerdan desde el Consistorio, existe un servicio de recogida de cartón puerta a puerta que recorre 80 calles al que pueden adherirse los comercios para no saturar los depósitos de papel.
Además, cualquier ciudadano puede solicitar que le retiren los residuos voluminosos (muebles, colchones, electrodomésticos, entre otros) que no pueda llevar a los puntos limpios. Para ello, pueden comunicarse con el Ayuntamiento a través del teléfono 010 o de la web municipal.
Las multas, según la ordenanza, pueden alcanzar los 80 euros, aunque los reincidentes pueden llegar hasta los 500 euros. No obstante, el Consistorio llegó a estudiar la posibilidad de endurecer las sanciones. Entre otras cosas, porque además de afear la vía pública y de suponer en ocasiones incluso un problema de salubridad, es una práctica que cuesta dinero.
Concretamente, solo limpiar el entorno de los cubos de toda la ciudad y retirar los grandes enseres que algunos depositan allí, para lo que se cuenta con 18 equipos prerrecogida que trabajan todo el día divididos en tres turnos, supone un desembolso de unos 2,5 millones de euros cada año de las arcas municipales.
Con todo, según aseguran desde la coalición PP-Cs, la iniciativa ha resultado ser "un éxito" ya que los infractores eran habitualmente los mismos y el volumen de sanciones ha disminuido notablemente, "incluso en fechas señaladas con mucha actividad hostelera".
