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El joven de 20 años acusado de violar a una chica de 13 en Zaragoza, absuelto por su falta de madurez
La menor nunca se sintió víctima y declaró en el juicio que mantuvo relaciones sexuales consentidas con el acusado. Sin embargo, los padres de la chica decidieron denunciarlo y la Fiscalía pedía 10 años de cárcel para él.
La relación sexual consentida que mantuvieron un joven de 20 años y una chica de 13 en Zaragoza no llevará finalmente a prisión al primero, tal y como pretendía la Fiscalía. Durante el juicio celebrado el pasado 16 de septiembre en la Audiencia Provincial, el ministerio público acusó a Luis Fernando A. de violación y pidió para él una condena de diez años. Sin embargo, los magistrados de la Sección Tercera han decidido absolver al procesado, ya que entienden que, pese a la diferencia de edad, el grado de madurez de la pareja era similar.
Como quedó patente durante la vista oral, la menor nunca se consideró víctima, ya que decidió mantener relaciones sexuales con el joven por voluntad propia. Sin embargo, al no haber cumplido los 16 años, sus padres decidieron presentar una denuncia en comisaría y Luis Fernando A. acabó sentado en el banquillo de los acusados. Cuando compareció ante el tribunal, aseguró que, por el físico de la chica, «nunca» imaginó que tuviera solo 13 años. Y ni él le preguntó la edad, ni ella se la dijo.
A la hora de absolver al presunto autor de los abusos sexuales, la Audiencia Provincial se ha basado en el artículo 183.4, que dice literalmente: «El consentimiento libre del menor de dieciséis años excluirá la responsabilidad penal por los delitos previstos en este Capítulo cuando el autor sea una persona próxima al menor por edad y grado de desarrollo o madurez». De hecho, los magistrados pudieron comprobar durante el juicio que la menor parece mayor y que con el encausado ocurre todo lo contrario.
Se vieron dos veces
Como recuerda la sentencia, los hechos se produjeron durante el verano de 2019 en Zaragoza. Tanto el procesado como la presunta víctima reconocieron que mantuvieron relaciones sexuales en dos ocasiones. La primera vez, en los aseos de una piscina y la segunda, en casa del joven.
«Fueron relaciones consentidas. Yo creo que no llegué a decirle cuántos años tenía, imaginé que mi amiga se lo habría dicho a su amigo», manifestó la adolescente. Tanto ella como el encausado coincidieron en que fueron sus dos respectivos mejores amigos –a su vez, pareja– quienes acordaron la primera cita. Tras aquel primer encuentro, la menor y el joven se pusieron en contacto a través de la red social Instagram para volver a verse y mantener relaciones.
