El Ayuntamiento de Zaragoza acelera sus principales obras de renovación para acabar después del verano

Con una ciudad que funciona al ralentí, el Ayuntamiento de la capital aragonesa sigue inmerso en varias obras con el objetivo de que estén terminadas en las próximas semanas. La compleja situación económica que ha traído consigo la pandemia del coronavirus ha provocado que algunos de los proyectos estrella del gobierno PP-Cs desciendan de la lista de prioridades o que se reduzca sustancialmente el presupuesto de algunos otros. No obstante, se han seguido llevando a cabo trabajos de arreglo del asfaltado o de mejora en la red de abastecimiento. Los principales proyectos suponen una inversión de 2,6 millones de euros, a los que habrá que sumar el coste de la reforma integral de Salamero, aún por determinar.

Como cada año, se está aprovechando la habitual paralización del periodo estival –a la que esta vez hay que sumar que toda la Comarca Central se encuentra en la fase 2 para frenar los rebrotes de la covid– para llevar a cabo estas obras sin causar grandes afecciones. En concreto, se está dedicando el verano a desarrollar la segunda fase del Plan de Intervención Urgente en el Viario Público –la primera se hizo durante el confinamiento–, renovar una gran tubería en la avenida de Navarra y aplicar un tratamiento a las baldosas de Don Jaime I para evitar resbalones. Además, continúan los trabajos para garantizar la seguridad de la plaza de Salamero y del aparcamiento subterráneo.

Medio centenar de calles

El Ayuntamiento culminará esta misma semana la reparación del pavimento de una veintena de calles (sobre todo de San José, Las Fuentes y Casco Histórico), que se sumarán a las 30 que ya se arreglaron en la fase anterior del plan de asfaltado en toda la ciudad. En total, se habrán reparado los baches, socavones y grietas de 50 calles y grandes avenidas, en algunos de sus tramos o en su totalidad, especialmente en los carriles bus y en los viales más afectados por el tráfico. Estos trabajos, muy demandados por los vecinos de los diferentes distritos, han supuesto una inversión de 1,6 millones de euros.

Además, a lo largo del mes de agosto se está actuando de manera progresiva en las baldosas de las calles de Don Jaime I y Santiago para evitar los molestos resbalones que se producen cada vez que el pavimento está mojado. Para limitar las molestias, cada día se está acometiendo un tramo de 150 metros cuadrados.

En concreto, se está aplicando un tratamiento superficial que abujarda o raya la piedra para que recupere su rugosidad. Tal y como explicaron desde el Consistorio, hacía 23 años que no se llevaba a cabo un tratamiento de estas características (por un importe de 100.000 euros) por lo que el suelo, de piedra arenisca, estaba ya muy desgastado.

Hasta octubre

En la avenida de Navarra, en la confluencia con la calle de Rioja, continúa la renovación de una tubería arterial de 1,4 metros de diámetro que suministra agua a unos 150.000 habitantes y que cruza la avenida de norte a sur, hacia La Almozara. Las obras, con un coste de 900.000 euros, comenzaron a finales de junio y tienen una duración prevista de cuatro meses, ya que se trata de una intervención compleja que requiere excavar a más de 5 metros de profundidad. Actualmente, está restringida la circulación de vehículos en el sentido salida de la ciudad y desviadas parcialmente las líneas de bus urbano 36, 42, 51 y 52.

Por otro lado, en la plaza de Salamero siguen los trabajos destinados a garantizar la seguridad y evitar un nuevo hundimiento del techo del aparcamiento subterráneo. Se está aligerando el peso con la retirada de los parterres y del mobiliario urbano y la próxima semana comenzarán los trabajos de trasplantado de los once olivos, que son los que tienen un mayor valor paisajístico, y se llevarán a un vivero a la espera de encontrarles una nueva ubicación. Entonces, se picará el pavimento y en septiembre esta fase quedará terminada.

Después, se llevará a cabo una inspección que determinará el estado de la estructura y se podrá elaborar el anteproyecto del futuro diseño de la plaza, del que el gobierno todavía no ha adelantado demasiados detalles.