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San Mateo retoma el proyecto para convertir el centro social en residencia de discapacidad
La instalación, que lleva más de una década construida, acogía hasta ahora las asociaciones de mujeres y de mayores.
El Ayuntamiento de San Mateo de Gállego ha retomado el proyecto para transformar el centro social, que se construyó hace más de una década, en un nuevo servicio de día para personas mayores y con discapacidad.
El alcalde, José Manuel González (PSOE), recordó que estas instalaciones se terminaron entre 2008 y 2009: "En su momento se pensó ubicar allí una residencia para estancias temporales y un espacio para centro de día. Por distintos motivos no se logró culminar ese objetivo y durante todo este tiempo han sido un lugar para el ocio para la tercera edad de San Mateo, oficinas de las asociaciones de los mayores y de mujeres y algunas actividades puntuales de ambos colectivos, lejos del uso inicial para el que estaban planteadas".
Era un edificio, según dijo, que estaba "infrautilizado" y cuya construcción "supuso un esfuerzo económico al Ayuntamiento". Finalmente, en 2018-2019 el Consistorio decidió abordar de manera unánime el proceso de remodelación "para poder dotar a San Mateo de más plazas de residencia de discapacidad psíquica y de centro de día para discapacidad y mayores".
El Ayuntamiento optó por destinar una parte importante del plan plus del 2019 de DPZ a la remodelación de dicho centro para adaptarlo a las normas que hoy rigen este tipo de instalaciones asistenciales: "Además habían pasado ya casi doce años de la construcción del centro y empezaba a tener algunos problemas serios con la climatización".
El alcalde relató que se pusieron en contacto con los técnicos del IASS para reinterpretar la reforma y adaptar el centro a las nuevas normativas. Las necesidades venían marcadas por las demandas establecidas desde la Fundación de Servicios Sociales de San Mateo, que gestiona ya en el municipio una residencia de mayores y otra de discapacidad psíquica y un centro ocupacional.
"En San Mateo hay un elevado número de discapacitados psíquicos que necesitan urgentemente este tipo de recurso asistencial y también mayores que se están desplazando a otros municipios a centros de día de mayores", dijo. El Ayuntamiento ha sacado ya a licitación las redacciones del proyecto de reforma del centro y de renovación del sistema de climatización. En total, ambas actuaciones superarán los 250.000 euros de inversión (luego habrá que equipar el interior). La intención es solapar las dos obras. El plazo previsto es de cuatro meses.
Traslado a otro espacio
El día 6 de enero fue el último que el centro acogió en sus instalaciones los usos de ocio que venía teniendo desde hace más de 10 años. González reconoció que la idea inicial era haber trasladado a los usuarios provisionalmente al nuevo centro cultural que se inauguró el año pasado, y que tiene un espacio de cafetería en su interior, pero la propuesta "no terminó de convencer a los mayores, principalmente porque para ellos está un poco a desmano".
Al final, reconoció el regidor, atendieron su petición y decidieron ubicarles en un espacio municipal que se encuentra frente al centro social: las antiguas escuelas de la localidad. En otras dependencias municipales que han recuperado (el antiguo centro médico) tendrán espacio para llevar a cabo sus labores de gestión.
Finalmente, el traslado a estas áreas fue efectivo dos días después del 20 de enero, San Sebastián, fiesta local de San Mateo y patrono de los mayores del municipio. Este nuevo espacio de ocio para la tercera edad se regirá de forma distinta a como venían siendo hasta ahora. Es un espacio que no cuenta con el servicio de bar que tenían antes, sino con una máquina de café y otra de refrescos. El personal que les atendía ha sido recolocado en otras actividades.
Para Alberto Mata, presidente de la asociación de la tercera edad (que agrupa a casi 500 personas), reconoció que "inicialmente hubo malestar, porque se cerró el centro, que sabíamos que era provisional sin haber tenido lista la nueva ubicación, y estuvieron sin espacio dos semanas" pero "la gente se ha adaptado muy bien". El anterior era un salón muy amplio y "ahora hay menos espacio, pero hay mucha luz y calefacción", indicó.
