Zaragoza

Pancartas para pedir civismo, limpieza y silencio en el entorno de la calle Pignatelli

Los vecinos colocarán mensajes en busca de convivencia "tras un verano insufrible".

En primer plano, un contenedor rodeado de basura, al fondo, un colchón y un mueble abandonados.

La calle de Ramón Pignatelli y las vías que la rodean (Cerezo, Agustina de Aragón y Zamoray), enclavadas entre Conde Aranda, el entorno de la plaza de toros y la avenida de César Augusto, no lucen con todo el esplendor que cabría esperar de una zona céntrica de la capital aragonesaEstán visiblemente sucias y con una clara falta de cuidado.

Sus vecinos lamentan el escaso respeto por la limpieza en los espacios públicos, los ruidos nocturnos y, en general, "la flagrante falta de civismo" de una parte de los habitantes de este entramado de vías estrechas, a medio camino entre el barrio de San Pablo y el distrito Centro y Las Delicias.

Por ello, y "tras un verano insufrible de ruidos y gritos por la noche, así como la cronificación del problema de la suciedad", han comenzado a constituirse como plataforma y han iniciado una ronda de reuniones con técnicos y responsables municipales. Su primera medida consistirá en "colocar grandes pancartas en las calles para exigir civismo, limpieza y silencio", explican desde la futura agrupación vecinal, aún sin nombre ni portavoz.

La falta de limpieza es uno de los principales caballos de batalla del vecindario. Y no se trata de que alguien tire un papel al suelo, sino de que continuamente aparezcan "colchones, muebles o pañales en mitad de la calle en cualquier momento del día, por poner solo algunos ejemplos".

Uno de los extremos que denuncian los habitantes del entorno de la calle Pignatelli es que solo en esta vía "hay hasta cuatro edificios que pertenecen a una institución bancaria y que están ocupados, y es precisamente en ellos donde viven algunas de las personas que menos respeto demuestra al resto del vecindario".

El presidente de la Unión Vecinal Cesaraugusta, José Luis Rivas, conocedor de la zona, sugiere que "el Ayuntamiento debería implementar una campaña de limpieza en condiciones de este conjunto de calles, en el que hay ciudadanos con un concepto de la limpieza y el orden diferente al del resto de la gente".

En este sentido, pone como "otro claro ejemplo" la entrada del arco de San Ildefonso, "que se ha convertido en un urinario público y requiere de limpieza y desinfección constantes".

Rivas critica que "mientras puntos adyacentes como la plaza de San Lamberto están en buenas condiciones porque acceden los camiones de limpieza, en las citadas calles la situación es bien distinta".