El Ayuntamiento de Zaragoza ha decidido apartar temporalmente de su puesto al funcionario responsable de la Oficina de Tráfico de la Policía Local, Javier V., al que se investiga por la presunta colocación de dispositivos en su despacho para grabar a sus compañeras. El empleado fue detenido ayer por la mañana como presunto autor de un delito contra el honor y la integridad moral, pero tras comparecer en la Jefatura Superior de Policía de Aragón quedó en libertad con cargos por la tarde sin llegar a declarar ante el juez de guardia. En cualquier caso y dado que las pesquisas siguen abiertas, el Consistorio ha preferido adoptar esta medida cautelar.

En un principio, la suspensión es por un máximo de seis meses, durante los cuales que el funcionario percibiría la mitad de su sueldo (que es lo que determina la ley para estos casos). De todos modos, fuentes municipales indican que será la investigación judicial la que determine finalmente cuánto tiempo se prolonga esta medida cautelar.