'Escape room' entre las ruinas celtíberas de Mara
Una room escape para huir a Numancia, novedad en la celebración de los 'Idus de marzo' de esta localidad zaragozana que cambió el calendario.
Aunque cueste creerlo, hoy 12 de marzo nos encontraríamos cerca de Fin de Año. Así sería si en el año 154 a. C la ciudad celtibérica de Segeda (en el zaragozano municipio de Mara) no se hubiese enfrentado al todopoderoso Imperio Romano.
Hasta entonces, Roma daba por comenzado el año el 15 de marzo, con la llegada de la primavera en los Idus de marzo. Sin embargo, la resistencia de este pequeño asentamiento celtíbero puso tan nerviosa a la metrópoli romana que decidió cambiar su calendario para acelerar dos meses la renovación anual de los cónsules y poder así empezar a mandar sus tropas a luchar contra Sekaiza (el nombre celtíbero de la luego romanizada Segeda).
Se llevó así a cabo un cambio en el calendario mundial, que ya llegado hasta nuestros días, fijando el inicio del año en el 1 de enero. Este decisivo momento es el que se conmemorará el próximo sábado 17 de marzo, en la localidad de Mara, a unos 15 km de Calatayud.
La Asociación Cultural Mara Celtibérica, encargada de la organización de los actos, apoyada por el Ayuntamiento de la localidad, ha preparado un completo programa, en el que destaca una atractiva novedad: una escape room en la habitación de una de las casas de Segeda Nova en la que los participantes deberán resolver una serie de enigmas si quieren conseguir la llave para abrir la habitación y escapar a Numancia, ante la inminente llegada de los soldados romanos. La escape room está programada entre las 11.00 y las 12.30, y cada grupo dispondrá de veinte minutos para encontrar todas las respuestas y poder abandonar la habitación.
A las 11.00 abrirá también el mercado artesano, con 27 puestos en los que se podrá ver el trabajo de diversos artesanos y adquirir sus productos, además de asistir a algunos talleres prácticos.
Mara Celtibérica realizará también una visita arqueológica guiada por el yacimiento de Segeda, cuyo proceso de recuperación está totalmente parado, lamenta la secretaria de la organización, Ana Belén Domínguez. Los restos se taparon para su protección, y ya no ha vuelto a hacerse nada, ni siquiera mejorar el cubrimiento que estaba preparado solo para ser provisional. "Aunque no se ha recuperado el yacimiento, por lo menos que se vea lo que tenemos", dice Dominguez.
Habrá también comida popular: las típicas lentejas de fin de año de la cultura romana, con unas borrajas aragonesas. Sabemos que se comían ya porque se encontraron en los restos de una vasija hallada en el yacimiento. Previamente, se habrá podido degustar una cata de vinos arqueológicos y tapas, para la que habrá que pagar 6 euros.
Con la caída del sol, en el santuario se celebrará un ritual solar de saludo a la primavera, y la jornada acabará con un fuego purificador y concierto de música celta con el dúo 'Luch'.
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