patrimonio
Los expertos advierten del riesgo de masificación turística en Albarracín
El Ayuntamiento crea un comité técnico para elaborar un diagnóstico y proponer medidas que eviten un deterioro de la situación.
Albarracín, uno de los principales reclamos turísticos de Aragón, quiere frenar la creciente masificación para no perjudicar los valores patrimoniales ni la calidad de vida de la población local. Ante el incremento de los periodos de saturación de visitantes, un grupo de expertos de distintas universidades se ha reunido este viernes en el Palacio Episcopal convocado por el Ayuntamiento para elaborar un diagnóstico de situación y propuestas de actuación para que uno de los emblemas turísticos de la Comunidad no muera de éxito.
Una de las integrantes del comité de expertos, la arquitecta Patricia Hernández, explica que existen datos "preocupantes" de masificación, como contar con muchos más alojamientos para el turismo que habitantes censados -1.600 plazas frente a 1.015 residentes-, la proliferación de grupos de visitantes "descontrolados" que acceden a tramos de muralla que se deterioran o el incremento de las viviendas turísticas en detrimento de las opciones de alquiler de los vecinos o de nuevos pobladores.
Hernández señala que el trabajo incluirá encuestas con vecinos, hosteleros y visitantes en la próxima Semana Santa y en otras fechas de máxima afluencia. El análisis de situación y las directrices de intervención estarán a disposición el Ayuntamiento a principios de 2025.
El gerente de la Fundación Santa María –anfitriona del comité de expertos–, Antonio Jiménez, admitió su "tremenda preocupación" ante las situaciones de congestión turística, que se da "en momentos puntuales" pero que va a más y pueden "poner en peligro" los valores patrimoniales o el prestigio. Advierte de que el turismo de masas puede llegar a ser "desagradable" para el visitante.
Jiménez indica que "antes la congestión se daba en Semana Santa y en el mes de agosto, pero ahora puede repetirse en muchos fines de semana, cuando las calles se llenan hasta los topes" y eso con lleva "riesgos" para el patrimonio y para la consideración de Albarracín en el mercado turístico".
