El pleno del Ayuntamiento de Teruel ha aprobado este viernes, por unanimidad y sin el más mínimo debate por parte de alguno de los grupos políticos, la contratación de una operación de préstamo a largo plazo por un importe de 1,6 millones de euros. La cuantía permitirá al Consistorio afrontar los elevados gastos derivados del colapso del edificio Amantes de la Calle San Francisco el pasado 13 de junio.

Mientras se investigan las causas del suceso, que dejó a 21 familias sin casa, el Ayuntamiento considera "imprescindible" atender una serie de actuaciones de inmediata necesidad para las que no existe partida presupuestaria dada la magnitud de su importe y es por ello que contrata un crédito bancario. Desde el equipo de gobierno, en manos del PP y con mayoría absoluta, aclaran que una vez depuradas las responsabilidades del derrumbe se reclamarán las cantidades a quien sea necesario si hay lugar a ello.

El pleno incluye en esos gastos los estudios técnicos, las medidas de seguridad en la zona derruida, las labores del posterior desescombro y la intervención en edificios colindantes al colapsado. También, el pago a servicios jurídicos y los gastos de alquiler de las familias realojadas y de atención hacia ellas.

Interés humanitario

"Desde este Ayuntamiento estamos actuando por interés humanitario, lo que nos hace asumir un montón de gastos elevados no presupuestados", destacó la alcaldesa de Teruel, Emma Buj, para justificar la solicitud del crédito, cuyas condiciones se remitirán en los próximos días a todas las entidades financieras con oficina abierta en la ciudad de Teruel para que presenten sus proposiciones hasta el próximo 10 de agosto.

La medida ha sido muy bien recibida por las familias que se quedaron sin hogar y que viven ahora en pisos de alquiler financiados por el Ayuntamiento por un plazo inicial de seis meses. Según el portavoz de todos ellos, Javier Carbó, la decisión municipal de obtener un crédito "tranquiliza" a los afectados, pues "garantiza que el Consistorio sigue en su posición de adelantar el dinero que sea necesario y que luego podrá recuperar de las compañías de seguros".

"Continuidad y futuro"

Para Carbó, el préstamo asegura "una continuidad y un futuro" en el pago de los alquileres de las viviendas de realojo por parte del Ayuntamiento más allá de enero de 2024. "Es una manera de salir adelante y pone de manifiesto la voluntad del Consistorio de encontrar una solución a los problemas", añade el portavoz de los damnificados.

Se trata de un crédito extraordinario cuyo límite viene fijado por la ley, que establece que no puede superar el 5% de los recursos para operaciones corrientes del presupuesto municipal. Su duración es de tres años y medio, por lo que el Ayuntamiento, como explicó la concejala de Hacienda, Carmen Romero, espera amortizarlo a lo largo de la legislatura.

El pleno, el primero de carácter ordinario en esta legislatura y con solo cuatro grupos políticos frente a los ocho anteriores, ha aprobado igualmente declarar el interés humanitario y social de las ayudas al alquiler de los perjudicados por el hundimiento.

Plan para reducir la basura en la Vaquilla

Los cuatro grupos que integran ahora la corporación municipal, PP –en el equipo de gobierno–, Teruel Existe, PSOE y Vox –en la oposición–, han estado de acuerdo en el pleno celebrado este viernes en crear un grupo de trabajo cuyo objetivo será poner en marcha acciones que reduzcan la cantidad de basura que se genera durante las fiestas de la Vaquilla.

El equipo estará formado por concejales, hosteleros y representantes de Interpeñas, quienes intentarán mejorar la iniciativa puesta en marcha en la última edición vaquillera para que los 11.000 peñistas usen vasos de plástico reutilizables y que apenas tuvo repercusión.

Las últimas fiestas dejaron 120 toneladas de basura, 40 más que en 2022, cuando la pandemia aún resonaba. "Debemos ser eficaces; si reducimos los residuos, podremos dedicar más recursos a la limpieza", ha afirmado el concejal socialista José Antonio Guillén, cuyo partido ha presentado la propuesta.