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El incendio de Oliete, estabilizado y sin riesgo para la población
El fuego, causado por un rayo, arrasó 150 hectáreas. El humo causó el desalojo momentáneo de un centenar de vecinos.
Un total de 150 hectáreas de matorral y pastizal y alrededor de un centenar de vecinos desalojados de sus casas durante tres horas. Ese es el resultado de un incendio que se declaró en la Sierra de los Moros la tarde del miércoles cerca del pantano de Cueva Foradada entre Oliete y Alcaine.
La causa fue un rayo debido a una fuerte tormenta a media tarde. Según la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), la mitad de los rayos caídos en España durante esa tarde lo hicieron en Aragón. Estiman que unas 10.000 descargas eléctricas tocaron tierra en la Comunidad entre las 06.00 del miércoles y las 06.00 del jueves.
El fuego se desató a unos dos kilómetros del casco urbano de Oliete, en una estribación de la Sierra de Sancho Abarca, una zona de muy complicado acceso, pero el penacho de humo resultante se pudo ver desde el primer momento desde el pueblo.
Pronto comenzó a sentirse un espeso humo y la caída de ceniza en el casco urbano. Se activó la alerta 1 de Protección Civil y se dio aviso desde el Ayuntamiento a la ciudadanía para que se confinase en casa. Ante la persistencia de esta situación, se emplazó al vecindario de la parte alta a dejar sus viviendas y acudir al pabellón.
El lugar se convirtió en el punto de encuentro de todos los medios que participaron en el amplio dispositivo que se desplegó enseguida y donde la presidenta comarcal, Marta Sancho, y el alcalde, Rogelio Villanueva, ejercieron de enlace con la ciudadanía. El fuego se dio por controlado a medianoche y quedó estabilizado a última hora de la mañana de ayer. Se mantienen medios en la zona en labores de vigilancia hasta que se dé por extinguido el fuego.
A las tres brigadas helitransportadas que actuaron en la misma tarde, se sumaron cuatro cuadrillas terrestres, cuatro agentes de protección de la naturaleza, tres autobombas de la DGA, además de la directora de extinción y personal técnico.
La intervención de Protección Civil, Guardia Civil, así como de Bomberos de la Diputación y el enlace con la Comarca de Andorra Sierra de Arcos, Ayuntamiento de Oliete y agricultores, resultaron clave. Oliete cuenta con casi 350 vecinos censados, pero el pueblo se encontraba el miércoles acabando sus fiestas en honor a San Bartolomé, por lo que el número de habitantes es en estos días considerablemente mayor de lo habitual.
"La gente se ha volcado con lo que ha hecho falta, alcaldes y vecinos se han puesto a disposición de Oliete y es de agradecer. Por suerte, no hemos lamentado daños personales", dijo el alcalde. "Se decidió primero confinar a los vecinos y segundo, desalojar a los de las calles altas porque había muchísimo humo y era perjudicial. Al principio parecía que no era mucho, pero pronto se ha avivado y con el aire más", recordó.
"Nos ha preocupado porque el monte está muy seco y ha prendido una zona con muy mal acceso. Vamos decidiendo atendiendo a lo que nos dicen Guardia Civil y Protección Civil", añadió la presidenta de la Comarca Andorra Sierra de Arcos.
Hubo momentos de tensión al inicio porque el viento no ayudaba y esto mantuvo en alerta a varios municipios de la Sierra de Arcos y Cuencas Mineras. El foco se situaba cerca del pantano de Cueva Foradada y desde Alcaine eran visibles las llamas. El humo también se notó en Alacón. En un primer momento, se barajó el desalojo de Oliete hacia Alloza y el alcalde esta localidad ofreció el pabellón, pero no fue necesario.
Con el viento más calmado y la presencia de lluvia, la situación mejoró y las personas desalojadas en el pabellón de Oliete regresaron a sus casas ese mismo miércoles, en torno al filo de la medianoche. Se mantuvo hasta ayer, jueves, el confinamiento en los domicilios hasta que pasase el riesgo causado por el humo.
