Dos jóvenes de 17 años que viven en la residencia para menores extranjeros no acompañados de Huesca, ubicada en pleno casco histórico de la ciudad, ha sido detenidos este martes tras protagonizar una fuerte pelea en plena calle. 

Los hechos se han producido en torno a las 19.00. Según han informado fuentes de la comisaría oscense, los dos menores se han agredido mutuamente por causas desconocidas cuando se encontraban en la plaza de los Fueros, muy cerca de la residencia. 

Como consecuencia de ello, uno de los jóvenes ha sufrido la fractura de la nariz y el otro ha recibido varios cortes con un cúter. 

Al lugar se han desplazado de inmediato dos patrullas de la Policía Nacional, que han detenido a los dos menores. Además, ambos han tenido que ser trasladados en ambulancia a un centro sanitario para prestarles asistencia médica de sus lesiones. 

Desde la comisaría oscense trasladarán las diligencias a la Fiscalía de Menores por presuntos delitos de lesiones, según las mismas fuentes.

Este mismo martes, la Policía Nacional había informado del arresto de un hombre de 56 años y con 21 antecedentes por causar lesiones graves a una mujer de 74 años al robarle el bolso por el procedimiento del tirón en una céntrica calle de Huesca. 

El autor de los hechos, natural de Albacete, estaba en libertad provisional mientras cumple una condena de siete años de cárcel en la prisión de Extremadura. Tras reconocer los hechos y ser puesto a disposición judicial, se decretó su ingreso en la cárcel.

Los hechos tuvieron lugar el lunes 26 de febrero, a las 21.00, cuando la víctima se disponía a entrar en el portal de su domicilio, en una calle situada en las inmediaciones de la Estación Intermodal. El detenido se acercó por su espalda y le arrebató el bolso que la mujer llevaba asido de su hombro izquierdo. Se lo arrancó con tal fuerza de la llegó a tirar al suelo. La mujer se golpeó la cabeza con un banco y además sufrió varias fracturas de la pelvis.

La Policía visionó todas las imágenes registradas en las cámaras de seguridad de la zona y gracias a ellas obtuvo las características físicas del agresor, estableciendo un operativo para su localización y detención.

Un agente detectó el día 7 de marzo a un hombre de características similares, observando que el mismo accedía a la Estación Intermodal y compraba un billete de autobús. Procedió a su identificación, comprobando que efectivamente se trataba de la persona que había sido registrada por las cámaras de videovigilancia.