Bailo recibe al Santo Grial en una jornada muy animada

El tiempo ha respetado la celebración de la recreación en la población aragonesa.

Bailo ha recuperado una de sus tradiciones rememorando el día en el que el Santo Grial llegó a esta localidad en el siglo XI
Bailo ha recuperado una de sus tradiciones rememorando el día en el que el Santo Grial llegó a esta localidad en el siglo XI
Laura Zamborain

Cinco años después, Bailo ha recuperado una de sus tradiciones rememorando el día en el que el Santo Grial llegó a esta localidad en el siglo XI. Una conmemoración en la que ha participado casi todo el pueblo, en una jornada que no era muy halagüeña en cuanto a la meteorología, pero en la que finalmente hasta ha brillado el sol. Desde 2018 no se había podido celebrar esta fiesta, ya que tiene carácter bianual y en 2020 por la pandemia tuvo que suspenderse, al igual que en 2022. Por ello, hoy ha sido un día especial para los vecinos de esta localidad de a Comarca de la Jacetania, en la que han vuelto a poner en valor la importancia que tuvo esta sede para el santo cáliz. Los actos los organiza la Asociación Cultural y Recreativa de Bailo, Acurba.

La comitiva esperaba a las 12.00 en la entrada del pueblo, en la zona del lavadero, la llegada de dos caballeros que portaban el Santo Grial. Procedía de San Adrián de Sasabe, para ser custodiado en la iglesia parroquial de Bailo. Desde ahí el séquito se ha desplazado hasta la plaza del pueblo: los monteros, cetrería, guardia real y timbaleros abrían el desfile. El rey Sancho III El Mayor, acompañado de su esposa la Reina Munia y el obispo Mancio II hicieron acto de presencia, seguidos del infante Ramiro I y el maestro Aitan Jimeno Garcés y los comisionados, que son los que portaban el santo cáliz. La comitiva la completaban los monjes benedictinos, los terratenientes de la zona así como aristócratas de los condados de Aragón, Cataluña y Francia. En total, una treintena de personas, en las que se incluían miembros de la Hermandad del Primer Viernes de Mayo de Jaca.

«Hago entrega a la población de esta carta de donación y custodia a favor de la iglesia de Bailo y nombro caballeros protectores a sus vecinos», dijo el Rey dirigiéndose a la población. Tan sagrada reliquia lleva la obligación de «darle culto, guarda y protección de daño o destrucción» y siempre debe estar acompañado «con luminarias de aceite y cera», añadió. Posteriormente, el Rey y toda su comitiva, se trasladaron a la iglesia, donde se entregó el Santo Grial a las autoridades eclesiásticas. El cáliz permaneció en la Sede Real de Bailo hasta 1045 custodiado por cuatro generaciones de Reyes Navarros y Aragoneses.

Éste ha sido el acto central de la recreación de la llegada del Santo Grial a Bailo, con un programa que ha continuado co una comida medieval, a base de migas, ternera guisada y postre de la zona. Y por la tarde, un taller de circo ha hecho las delicias pequemos y mayores. La exhibición de cetrería y la actuación de los Titiriteros de Binéfar, ha completado la programación de este sábado. En la zona de la plaza, durante todo el día se ha podido visitar el mercado medieval, que abrirá sus puertas mañana domingo por la mañana, y tendrá lugar una actividad para niños y niñas.

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