Las peñas de Huesca se preparan para vivir "la mejor semana del año"

Las fiestas de San Lorenzo dieron un giro de 180 grados cuando, a finales de los 50, nacieron las peñas. Hoy no se entienden sin ellas pero piden que su voz se escuche más allá de los festejos.

Los seis presidentes en el tendido de sol de la plaza de toros, lugar de la peñas durante los festejos taurinos de San lorenzo.
Los seis presidentes en el tendido de sol de la plaza de toros, lugar de la peñas durante los festejos taurinos de San lorenzo.
Javier Navarro

Los actuales presidentes y presidentas de las seis peñas recreativas de Huesca ni recuerdan, por su edad, cuando empezaron las oscenses a formar parte de estas entidades, con sus derechos y sus obligaciones. Creadas a finales de los años 50, estas asociaciones se caracterizaban por ser eminentemente masculina. Hasta la década de los 60 y 70, las mujeres se consideraban ‘simpatizantes’ o invitadas y no estaban obligadas a pagar la cuota.

La peña Los 30 lo refleja en el programa de San Lorenzo 2023: Hasta 1960 no se podían superar los 30 socios, estos no podían estar casados y no se permitían mujeres. El papel femenino durante los festejos correspondía a las reinas de las fiestas y a las componentes de los grupos foclóricos.

Afortunadamente, las mujeres no están hoy postergadas a esos roles y desde hace un tiempo (que tampoco es mucho) desempeñan, cuando toca, las presidencias de las peñas, elemento que define, diferencia y cohesiona las fiestas laurentinas. Su trabajo les cuesta, porque su funcionamiento depende de los socios y el números de estos, de las actividades que cada una organice a lo largo del año.

Porque ser peñista no va de tener un carné, un abono para los toros o una pulsera sellada sino de tener todo el año hambre de fiesta. Supone disfrutar al máximo de la fiesta y pensar en la del año siguiente cuando el 15 de agosto, en la plaza San Lorenzo, se caen las lágrimas por la semana que acaba.

Ser peñista conlleva pelear por los horarios, las ubicaciones y la ayuda municipal que cada año se recibe para contratar una charanga que ponga música en las calles y la plaza de toros. Al final, es organizarse la vida alrededor de los «mejores siete días del año».

Por ello, y tras el cambio de color en el ayuntamiento insisten en que para hacer el programa se tenga en cuenta su opinión. "Estamos en la ciudad todo el año y nos tiene que dejar hacer más cosas, permitirnos más participación y, sobre todo, que nos escuchen", coinciden. Cotillones, carnavales, Feria de Abril, fiesta de la cerveza... con algunas de las propuestas que se querrían recuperar.

El sentimiento

Las peñas confían en que las fiestas de este año sean, como poco, tan excepcionales como las de 2022. "Incluso mejores porque, pese a que estábamos en la normalidad, seguía reciente la covid y había recelos", dice Álvaro Antoñanzas, presidente de Los que Faltaban. "Creo que la pandemia nos hizo ver lo que podemos perder, los que en muchos casos hemos perdido y todos entendemos que la fiesta es algo que hay que cuidar porque si desaparece no volverá", apostilla. "San Lorenzo y los festejos existirán, pero puede que no como los conocemos si dejamos perder la tradición", añade.

Los socios de Zoiti están convencidos de que volverán a vivir "la mejor semana del año". Su presidenta, Jennifer Iglesias, constata que hay una sostenida recuperación del sentimiento peñista, según se ha reflejado en la participación de los actos desarrollados: el vermú navideño, el paje real en la peña, los encierros infantiles con almuerzos y vermús el día de San Vicente, una fiesta para jóvenes, cuentacuentos para niños pequeños y el picoteo prelaurentino. 

"Cuando cogí la presidencia, mi idea era hacer actividades durante el año para vernos más y no solo durante las fiestas, que es se hacía últimamente", apunta. "Pero los dos años de pandemia nos perjudicaron mucho porque no entró ningún ingreso, salvo de los socios que nos dieron un donativo para seguir viviendo", manifiesta la presidenta de Zoiti.

La histórica campaña de 2022 permitió a las peñas disponer de algo más de dinero en efectivo, que se destinó a organizar actividades a lo largo del año. El objetivo: «Que la gente que ha participado en ellas y no son socios, se animen a serlo», comenta Fran Ferrer, presidente de La Parrilla.

Tomás Hernández (Los 30) apuesta porque se repita lo de año pasado. "Estuvo genial, la vez que más gente he visto y para nosotros fue económicamente mejor ya que, tras dos años de pandemia, estábamos medio arruinados todos", dice. La peña tampoco ha parado. Lo último ha sido la Semana Cultural. Todo ayuda a fomentar la identidad de una peña, algo que se iba diluyendo... "No hablo de ningún partido político, pero la última década la línea ha ido descendiendo; no quiero decir que partiéramos de 10... Tenemos que trabajar todos", admite Hernández.

En el Jai-Alai, sede la Alegría Laurentina, la actividad también es intensa. Este año, incluso ha preparado cuatro conciertos, desde hoy al domingo, a la hora del vermú. "La mañana estaba un poco vacía y nosotros nos encargaremos de llenarla", apunta el presidente, Javier Ibarz. El aforo es de 299 personas y para los ‘socios amantes’ es gratuito.

"A ver si ahora, con el cambio de Ayuntamiento, nos proporcionan sitios para poder hacer actividades a lo largo del año"

Organizar actividades es una ventaja de las peñas con local propio, dice Ana Lite, presidenta de la 10 d’ Agosto. "A ver si ahora, con el cambio de Ayuntamiento, nos proporcionan sitios para hacer algo", señala. Según explica, el convenio anual contempla la cesión de uso de la plaza de toros, el Palacio de Congresos y el Centro Cultural Manuel Benito Moliner. "Pero no puedes organizar nada a no ser que lo hagamos las seis peñas en conjunto, y eso que el acuerdo es individual", precisa. 

Insiste en que a la hora de presentar una propuesta "todo son trabas burocráticas". "Con el anterior gobierno tuvimos muchos problemas, no sé si era a título personal o porque la ley ha cambiado", apunta Antoñanzas.

"La oferta taurina también tiene que ver en el resurgir peñista", reconoce Fran Ferrer. La empresa Tauroemoción, que gestiona la Feria de la Albahaca, ofrece un 30% de descuento en los abonos de sol. Los socios, además, entran gratis en las vaquillas. Ana Lite apunta que las entidades recreativas se convierten en algo parecido a "dispensadores de la plaza de toros, pero eso nos repercute en la captación de socios".

En busca de espacio propio abierto hasta al amanecer

Hace años que las peñas batallan por conseguir un espacio que las identifique a la primera de cambio con las fiestas de San Lorenzo, la música y el encuentro hasta el amanecer. Tiene que ser lo suficientemente amplio para que cada entidad tenga su sitio y con una ubicación que permita el descanso de los vecinos. Desde 2012 están situadas en la plaza Navarra, pero todas quieren "algo más que una barra".

Las seis entidades coinciden en que el lugar está bien porque es céntrico. "Necesitamos la plaza Navarra por las barras pero echamos de menos un espacio donde hacer actividades para nuestros socios", indica Tomás Hernández (Los 30). «Habría que plantearse la ubicación», añade.

El lugar donde están las peñas en fiestas abre a las 23.00 y cierra a las 3.00. Durante parte de ese tiempo y en el escenario anejo se ofrecen conciertos. La programación, que hace el Ayuntamiento, quiere contentar a todos, pero a veces solo gusta a unos pocos. "Este año son muy flojos", dice Ana Lite (10 d’Agosto). "Esperas que la oferta sea para atraer a la gente, no como acompañamiento", explica. Además, señala que a la mayoría "no nos importa volver allí abajo (polígono 29)"

Todas opinan que la hora de cierre es un obstáculo. En la plaza del Mercado están hasta las 5.00 y en la explanada del Palacio de Congresos, hasta las 7.00. "Que nos dejen cerrar a las 6.30 o que nos lleven al recinto de antes, para estar hasta las 7.00 e ir desde allí a las vaquillas", propone Fran Ferrer (La Parrilla).

Álvaro Antoñanzas (Los que Faltaban) está contento de, al menos, tener un sitio. «Me gustaría recuperar el recinto en el polígono 29, o tener un modelo como el Teruel para que las peñas recuperaran su protagonismo. En la plaza Navarra estamos juntas, con un trozo de barra...", precisa 

Zoiti sigue defendiendo ir a plazas diferentes "para llevar la fiesta a distintos puntos de la ciudad". "Pero aquí no estamos mal", apunta Jennifer Iglesias.

Javier Ibarz (Alegría Laurentina) considera que la plaza Navarra es una buena ubicación: "Estamos bien situados por las barras, es un sitio donde se trabaja y al que puede llegar todo el mundo". "Pero no nos oponemos a experimentar otro emplazamiento", afirma. Eso sí, sea el que sea tienen que estar todas juntas porque "si repartes es más gasto, por ejemplo en equipos de sonido, en seguridad…", destaca.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión