La Academia de la Jota y el Folclore de Aragón reconoce a cinco representantes de Huesca

Se ha distinguido a 41 figuras vinculadas al canto, el baile, la música y la indumentaria aragonesa, con un reconocimiento a la Contradanza de Cetina, declarada Bien de Interés Cultural Inmaterial en 2012.

La Sala de la Corona del Edificio Pignatelli, sede del Gobierno de Aragón, ha acogido por segundo año consecutivo el acto de nombramiento de los Académicos de Honor de la Academia de las Artes del Folclore y la Jota de Aragón. Durante el evento, celebrado este viernes y presidido por el consejero de Educación, Cultura y Deporte del Gobierno de Aragón, Felipe Faci, se ha distinguido a 41 figuras vinculadas al folclore y la jota de Aragón. Entre estos se encuentran cinco de la provincia de Huesca:  Josefina Mendiara, Pepa Ramón, Lorenzo Allué, José Luis García y José Mauri. Tambén se ha realizado una especial mención a la Contradanza de Cetina, declarada Bien de Interés Cultural Inmaterial en 2012.

Con tan solo ocho años, Lorenzo Allué comenzó a entonar sus primeras jotas, debido a la tradición familiar. En 1944 empezó a recibir clases de jota cantada de Antonio y Fidel Seral y cuatro años más tarde, a bailar de la mano de Pablo Luis Maza. Tiempo después se incorporó a la Agrupación Folklórica Santa Cecilia de Huesca, en la que a veces formó pareja con Ángeles Montori. A principios de los años setenta dejó el baile y retomó el canto con Camila Gracia. A principios del siglo XXI comenzó a colaborar con el Grupo Elenco, también de la capital oscense. Fue su hijo quien recogió el premio en su nombre.

El nombre de José Luis García Castellón es sinónimo de folclore. Es uno de los pocos que pueden presumir de haber vestido el traje regional durante casi siete décadas. Su dedicación a la jota aragonesa lo llevó a la junta directiva Grupo Folklórico Nuestra Señora de la Alegría de Monzón más de 20 años y a la presidencia de la entidad, de la cual es el miembro más antiguo, durante otros 14. Jotero en todos los sentidos, bailador de joven y músico en la actualidad, este hombre ama sus tradiciones y ha dedicado su vida a preservarlas.

José Mauri nació en Almunia de San Juan (Huesca) y reside en Binéfar. Desde muy pequeño formó parte de la rondalla de su pueblo, a la vez que estudió solfeo y piano. Fue organista de su parroquia de los 16 años hasta que se trasladó de localidad, en 1974. En 1962 entró en el Grupo Folclórico Nuestra Señora de la Alegría de Monzón y en 1967 tomó las riendas de la sección de baile. Durante 14 años fue profesor de música y a lo largo de 20 fue profesor y coreógrafo. Entre 1987 y 1997 se hizo cargo de la Agrupación Raíces ZA-HU-TE (Casa de Aragón de Lérida).

Josefina Mendiara no ha podido acudir al acto ya sido Pepa Ramón quien ha recogido su diploma. Su reconocimiento obedece a la importante labor realizada para la conservación del traje tradicional ansotano. Recopiló los nombres de cada una de sus prendas y sus respectivos componentes y aprendió las técnicas para almidonar las camisas de gorguera, hacer el peinado de churros y vestir los trajes. Trabajó en la recuperación de prendas y joyas existentes en las casas y adquirió material aparente para los arreglos y nueva confecciones. Impulsó la Asociación ‘A Cadiera’ para todo lo relacionado con el Traje de Ansó.

Pepa Ramón ha tenido durante décadas una estrecha vinculación con la tarea colectiva de recuperación y reconocimiento del folclore aragonés, especialmente del pirenaico. Nacida en Huesca, vivó muchos años en Sabiñánigo. Muy vinculada a la cultura tradicional y a la jota. Desde 1985 formó parte del Grupo Folclórico Santiago de Sabiñánigo como cantadora. En 1991 regresó a a capital oscense. Forma parte de la Asociación Cultural Acordanza desde su fundación.

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