Se busca albañil, encofrador, encargado de obra y maquinista para trabajar en Huesca

Los constructores de la provincia afirman que las empresas están teniendo "verdaderos problemas" para encontrar trabajadores cualificados del sector y que no se cubren las ofertas de empleo actuales. 

Cada vez hay más obras en toda España. El problema es que faltan trabajadores para llevarlas a cabo. Mano de obra cualificada como electricistas, fontaneros o encofradores. Los expertos aseguran que se necesitan cursos para especializarse. Tras el estallido de la burbuja muchos jóvenes se fueron a otros sectores, y ahora no vuelven porque los salarios son muy inferiores a los de hace diez años.
Dos trabajadores en una obra.
Heraldo

El sector de la construcción en la provincia de Huesca ha presentado unos datos positivos en todos sus ámbitos en el balance de 2022. También en el empleo, que el año pasado experimentó un incremento del 7% respecto a 2021, lo que supone que el ejercicio se cerró con  164 respecto al anterior con 164 trabajadores más. "Desde 2014, cuando se tocó fondo, la contratación no ha dejado de crecer año a año", señalan desde la Federación de Asociaciones de la Construcción (FAC) del Alto Aragón, que ha celebrado su asamblea anual este fin de semana en Canfranc. 

No obstante y a pesar del dato positivo de este último año, los constructores destacan que desde la crisis económica del 2008 se han perdido más del 50 % de empleos directos en el sector. En relación con el 2007 hay 5.722 trabajadores menos. 

La FAC subraya que esa gran destrucción de empleo ha derivado en el traslado de muchos de los profesionales a otros sectores y que los que se han mantenido hasta hoy están muy próximos a la edad de jubilación. De nuevo, la Federación insiste en la "gran falta de personal para trabajar". Según afirma, la empresas están teniendo "verdaderos problemas para encontrar trabajadores cualificados de la construcción y no se cubren las ofertas de empleo actuales".

La falta de relevo generacional y cualificación en el sector son sin duda los problemas más relevantes del sector. Oficios como el de albañil, encofrador, encargado de obra y maquinista son los más demandados por las empresas que buscan personal para ejecutar sus obras.

Como se ha trasladado en varias ocasiones a las diferentes administraciones abogan por la formación en albañilería y por "concienciar a los jóvenes y padres de dicha necesidad". A nivel nacional, el sector ha pedido al Gobierno un plan de choque para intensificar esta formación. 

Los constructores lamentan que la imagen del sector sigue estando asociada a "las exigencias de esfuerzo físico, la exposición a las inclemencias meteorológicas propias del trabajo a la intemperie y la temporalidad". Sin embargo, defienden que esto está cambiando. "Se trata de un sector que está en plena transformación, donde se están desarrollando con gran rapidez múltiples procesos orientados a la especialización y la calidad y donde el esfuerzo físico está dando paso a herramientas tecnológicas", apostillan desde la FAC.

Actualmente la población activa del sector en la provincia representa el 8,2% del total de empleos directos mientras que en indirectos superaría el 25%. En cuanto a la media de edad, solo el 9% de los trabajadores de la construcción son menores de 30 años. Ocurre todo lo contrario con los trabajadores mayores de 50. Su peso es cada vez mayor en el sector, por encima del 30% en los últimos dos años. Uno de cada tres empleados supera la cincuentena, mientras que los contratos con los que tienen menos de 30 no representa ni una décima parte (9%), según el INE.

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